El informe, que fue presentado ayer por el director del Centro José Sanmartín, analiza las estadísticas de los países sobre legislación de violencia de género y sobre el número de feminicidios en general y también especifica los que han tenido lugar en el entorno doméstico y de la pareja.
Los datos concretos de 2006, tras analizar en este apartado los de 44 países, muestran que España está por debajo de la media mundial y europea en cuanto a asesinatos de mujeres tanto por un desconocido como por un familiar o por su pareja o ex pareja.
En particular, en España hubo de media 5,15 feminicidios por cada millón de mujeres, mientras que en Europa la cifra sube hasta los 9,90 por cada millón de mujeres y en el mundo, la media fue de 19 mujeres asesinadas.
En cuanto a los asesinatos de mujeres en el ámbito familiar, han sido 40 países los analizados e indican que la media mundial fue de 6,02 feminicidios por cada millón de mujeres, en tanto que en España se registraron 3,49, en Europa, 4,90, y en América, 9.
Respecto a los crímenes machistas, el estudio recoge los datos suministrados por 35 países y apuntan que, a escala mundial, hubo cinco mujeres asesinadas por sus parejas o ex parejas por cada millón, una cifra que en España desciende a 2,81 y en Europa a 3,94, mientras que América está por encima con 8,15 víctimas por cada millón de mujeres.
Sin embargo, estas cifras cambian cuando se muestra su evolución desde 2000 hasta 2006.
Y es que, a pesar de que en el mundo y, en España en particular con un 45,3% menos, los feminicidios han descendido, no ocurre así en el caso español con los asesinatos de mujeres en el seno de la familia y de la pareja.
En concreto, en España, los feminicidios domésticos han aumentado un 6,73%, lo que la sitúa como el quinto país en el que durante los seis años analizados por el estudio más se ha incrementado, es decir, siete de cada diez mujeres mueren a manos de un familiar.
Sobre los asesinatos por violencia de género entre 2000 y 2006, sólo cuatro países han registrado un aumento de este tipo de feminicidios, entre los que España se encuentra en el tercer puesto, ya que ha crecido un 15,16% y sólo está por encima de países como Chipre y Colombia.
Estas cifras, según una de las coordinadoras del informe, Isabel Iborra, demuestran que “las españolas están más seguras en la calle que en su propia casa”, por lo que, en su opinión, hay que hacer cambios en cuanto a la prevención de la violencia machista.
El tercer informe internacional, que se ha elaborado a partir de datos ofrecidos por 300 instituciones, sobre todo por los ministerios de Interior y Justicia, recoge también las opiniones de las ONG sobre la aplicación de las leyes de violencia de género.
De los 135 países analizados en este apartado, 72 habían impulsado, entre 2000 y 2006, leyes contra la violencia machista, de los que correspondieron a Europa una treintena de leyes.
Una encuesta a las ONG de 22 países sobre la eficacia de estas leyes, refleja que el 81,08% de ellas considera que no se han regulado todos los aspectos necesarios para disminuir la violencia contra la mujer; el 83,78% estima que los mecanismos para su implementación son insuficientes; y el 89,19%, que los fondos para su aplicación son escasos.