Hoy, 4 de septiembre, se celebra el Día Mundial de la Salud Sexual, una jornada para reflexionar sobre la importancia de la educación y el conocimiento sobre la sexualidad. Si hablamos de sexo, a menudo creemos que lo sabemos todo, pero ¿es realmente así? Las respuestas a esta pregunta pueden variar dependiendo de a quién se le pregunte.
No es lo mismo preguntarle a Clara, la joven propietaria de Kiki con Amor, quien define la sexualidad principalmente como "erotismo, placer y reproducción", que nos atiende amablemente, que a mujeres maduras que nunca tuvieron acceso a información sobre el tema en su juventud. Lo comprobamos, en el Mercado Central de Abastos de Cádiz, cuando una gaditana de mediana edad responde a nuestra pregunta con incertidumbre: “¿Qué te digo? No sabría decirte”. Por otro lado, una turista avanzada de Barcelona opina: “Es cómo siente el cuerpo y cómo se siente la persona”, mientras su amiga añade: “Es simplemente un aspecto más de la vida”.
Para estas mujeres maduras, el sexo siempre ha sido un tema rodeado de tabúes. “No te contaban nada, absolutamente nada”, recuerda la primera. “Las madres decían que había ropa tendida y no nos informaban. Incluso sobre las menstruaciones nos decían que venía el tío, sin aclararnos nada”, agrega otra mientras realiza su compra diaria.
Por aquel entonces, nos cuentan, la palabra “sexo” solo se mencionaba en conversaciones privadas con amigas. “Estaban perdidas. Lo que ellas se informaban nos lo iban contando de unas a otras; a veces, la información era errónea, como se puede esperar. Nosotras pensábamos que los niños los traía la cigüeña cada vez que llegaba uno nuevo al pueblo”, explica una de ellas.
A la hora de aprender, la escasa información disponible se obtenía a través de la pareja. “Poquito a poco, con él, una iba descubriendo de qué se trataba, porque antiguamente todo era muy diferente. No era un tema que se hablara con los padres. Había mucho respeto. Ojalá nos hubieran dicho más”, expresa una de ellas. Sabiendo esto es comprensible que muchas mujeres de su generación nunca hayan experimentado el orgasmo; es raro encontrar a quienes lo han logrado con su pareja. Según estudios recientes, entre el 91% y el 95% de las mujeres encuestadas llegan al clímax solas, frente al 7% que lo logra en relaciones heterosexuales.
Una falta de información que continúa afectándolas, especialmente al enfrentar problemas relacionados con la edad, como la menopausia, la sequedad vaginal y la inapetencia sexual. “El sexo ahora es más importante, aunque es diferente: menos pasional e impaciente, pero con más afecto y cariño”, confiesa una mujer. Por eso, muchas de ellas, ahora con Internet experimentan lo que denominan "una revolución sexual", tirando de aquella canción de ‘La Casa Azul’. Un nuevo despertar sexual, ahora que tienen la información a su alcance.
Todo lo contrario que vemos en los jóvenes, quienes a pesar de la sobreinformación, parecen estar más desinformados que nunca siendo su principal referente la pornografía. “Creen que con San Google lo saben todo. Sin embargo, en Internet abundan experiencias negativas por falta de información adecuada, y esto puede marcar su futuro. El sexo no es lo mismo que el porno”, afirma una de las mujeres.
Por eso para los expertos, es crucial hablar sin tapujos sobre el sexo, especialmente para aquellos que creen que la pasión muere con la edad.
