Seguimos con el repaso de agrupaciones finalistas y llega el turno de los coros. Acudieron a la llamada de Carnaval y Punto TV de Onda Luz TV, Juan Lucena, director del coro de Julio Pardo y ganador del primer premio, y Sebastián Girón, componente veterano del coro de Los Niños que se alzaba con el tercer premio.
Lo primero que hicieron fue el balance del carnaval pasado y Lucena decía: “Hemos quedado muy contentos, tampoco esperábamos la acogida que hemos tenido, aunque sabíamos lo que llevábamos hasta que no lo presentas no lo sabes realmente. El primer día fue magnífico, el público se entregó y nosotros también. Por más que hemos querido buscar algún fallo al coro ese primer día no lo hemos conseguido”.
Por su parte, Chano apuntó que “ha sido un concurso bastante bueno; además de cantar bien nosotros tras acabar cada uno de los cuatro pases el grado de disfrute era altísimo”. “Ha sido un coro con el que hemos disfrutado muchísimo los cuatro pases. Era complicado no hacerlo con un coro así, son regalitos que le sale a Nandi de vez en cuando. Le salió en el 97 con Trinidad, que también fue tercer premio. Son coros muy agradecidos”, afirmó.
Tenía ganas de final el conocido como coro de Los Niños, aunque ha cambiado su forma de ver el certamen. “Llevábamos dos años que no pasábamos a la final y es cierto que el coro ha tomado una filosofía, la de ir a ganar pero nos quitamos lastre. El concurso es simplemente un concurso. Hay cosas mucho más importantes por las que amargarse que por entrar o no en la final”.
Para Juan Lucena, una de las claves del palmarés tan espectacular del coro de Julio Pardo es el grupo. “En el coro hemos logrado ser una familia y vamos todos a una”. Se enorgullecía el director. Además añadía que “este año no hemos tenido ni la referencia del ensayo general de la familia ya que por espacio no lo hemos hecho. El día que el coro ensaya con el decorado, es un disfrute para el coro”.
Una de las anécdotas del coro La Trattoria fue el fallo en uno de los pases de la pistola que portaba Juan Lucena. Pistola que, por cierto, necesitó una serie de requisitos. “Hacía falta unos permisos de la Guardia Civil. Me reuní con ellos y estuvieron viendo el arma y me dieron el permiso. Luego tuve que ir a la Subdelegación del Gobierno para otro permiso para poder utilizarla en el teatro. Hasta la tarde del día antes de cantar, no recibí el fax con la autorización pertinente”, contó Lucena.
Dos coros que dejan el listón muy alto para el concurso de 2016.
