Bomberos del Consorcio de Bomberos en el parque de Cádiz intervinieron esta madrugada en un incendio en una segunda planta de una vivienda en la calle Isabel La Católica, en el casco antiguo de la ciudad.


Los profesionales localizaron el fuego en un dormitorio, apuntando todo a que el origen pudo ser una vela. Cuando se produjo el incendio, en el interior de la vivienda se encontraba el hijo de la propietaria, estando ya en el exterior cuando llegaron los bomberos.


El incendio produjo, según indican bomberos, grandes cantidades de humo y temperatura, lo que dificultó el acceso a la vivienda.


Parte del operativo localizó la habitación en llamas y otros efectivos rastrearon la casa para confirmar que no había nadie más en el interior de la misma. La habitación contenía gran cantidad de materiales, ropa y enseres, por lo que los bomberos tuvieron que ir apagando, refrescando y sacando al exterior los restos incandescentes para reducir la temperatura y evitar la propagación.


Fueron necesarios 3.000 litros de agua para completar la extinción. Una vez controlado, se produjo la extinción y se inició la ventilación forzada de la vivienda.


Los vecinos del ala derecha del inmueble, los de pisos superiores y azotea, optaron por abandonar la casa, sin daños. Los ocupantes del bajo, donde se produjo una filtración de agua, decidieron, según las recomendaciones de los servicios de emergencia, permanecer en el interior de la casa. Los pisos del ala izquierda no se han visto afectados.


El fuego quemó el dormitorio de origen en su totalidad, afectando parcialmente a otro y a parte de los pasillos y el humo y la temperatura al resto de la casa. Los bomberos procedieron a sanear revestimientos de techos y paredes e inspeccionar las vigas. Se desplazaron un total de seis bomberos en el parque de Cádiz con tres vehículos, dos autobombas y uno de rescate. La actuación se prolongó durante dos horas y media.