Como cada año, el alcalde de San Roque, Juan Carlos Ruiz Boix, ha querido colaborar con la recogida de alimentos solidaria que por estas fechas realiza en IES Castilla del Pino, destinada a Cáritas del Municipio. La iniciativa parte del subdirector del centro, Francisco Collado, y el alcalde estuvo acompañado por la delegada de Educación, Belén Jiménez, y el edil de Participación Ciudadana, David Ramos, así como el director del centro, Evaristo Ruiz.
El alcalde comentó que “un año más el Instituto desarrolla esta experiencia solidaria, y principalmente su promotor, su profesor Paco Collado, que junto con el resto de alumnos, promueven el que se despierten mayores episodios de solidaridad entre todos los sanroqueños, que poco a poco y con aportaciones, unos más pequeñas y otros de mayor cuantía, se van haciendo que todos esos estantes se vayan completando”.
“Este año 2018 vuelve a colaborar el pueblo de San Roque y sigue siendo necesario. Queda aún una semana y es lo que quiero hacer hoy, no únicamente el cooperar y colaborar sino el que se vea la figura del alcalde haciendo un llamamiento a todos los ciudadanos que puedan realizar alguna aportación, ya que tienen hasta el próximo viernes 21, donde se pueden sumar vecinos y empresas, tanto pequeños como medianas y grandes para colaborar en llenar los estantes”.
“Confío -continuó el alcalde- que la hagan en estos tiempos en los que siguen existiendo dificultades y necesidades en estos más de 10 años de crisis”.
Según Ruiz Boix, sí es cierto que se ha reducido el número de desempleados, aunque todavía hay familias que cuentan con alguno de sus miembros en desempleo, por lo que cualquier ayuda es poca.
Por su parte, el subdirector del centro, Francisco Collado, comentó que “un año más estamos en la recta final, estamos contentos, estamos haciendo lo que tenemos que hacer y al menos echar una mano a Cáritas con nuestra pequeña aportación”.
Collado recordó que van a ampliar una semana más la campaña, para lo cual hizo un llamamiento, ya que aquel que todavía tenga ganas de venir y de traer algo, tiene aún la oportunidad de hacerlo”, indicó.
“Este año hemos notado que ha decaído la colaboración y parece que no vamos a conseguir tanto como en años anteriores. De todas formas, todavía queda una recta final donde es posible que se reponga la cantidad”, aclaró. Collado hizo una llamada a toda la comunidad educativa para que también echen una mano.
El pasado año se transportó al almacén de la Parroquia Santa María Coronada el grueso de lo donado, más de 2.000 kilos de productos básicos que se distribuyeron entre las familias más desfavorecidas.