Chiclana cuenta en la actualidad con un total de 296 plazas de aparcamiento reservadas a personas con algún tipo de discapacidad, según un informe elaborado por la Policía Local. Esta cifra supone un incremento de 31 plazas más que en 2012, “fruto del compromiso municipal por atender las peticiones de aquellos ciudadanos que tienen una movilidad reducida”, según ha manifestado el delegado municipal de Tráfico y Movilidad, Agustín Díaz.
Los lugares donde se han ubicado los nuevos estacionamientos son, entre otros, la calle Fernando de Magallanes, la Plaza de las Palmas, Avenida de los Crustáceos, la carretera de Medina, el Novo Sancti Petri, la calle Ancha, calle Sevilla, el Estadio de Atletismo y la calle Ánimas.
La creación de este tipo de estacionamientos viene motivada bien por las peticiones ciudadanas, bien por la obligatoriedad legal de contar con un número determinado de ellos.
En el primero de los casos, tras la solicitud presentada por un particular ante la Policía Local, ésta procede a inspeccionar la zona y, tras comprobar la viabilidad, la concede o no. En este sentido, cabe destacar que para poder solicitar una plaza de estas características, es necesario que el demandante tenga reconocida su discapacidad por los Servicios Sociales, dependientes de la Junta de Andalucía y disponer de la tarjeta del vehículo expedida por el gobierno autonómico.
En esta eventualidad, el criterio que utiliza la Policía Local para autorizar el establecimiento de un aparcamiento reservado a discapacitados se basa en la existencia o no de este tipo de estacionamientos en la calle o zona, ya que “en el caso de que sí existan un número suficiente, de manera que ampliar su cifra impidiese aparcar al resto de los usuarios, no se pueden conceder nuevos emplazamientos”.
En este sentido, Díaz ha recordado que “estas plazas no están personalizadas, por lo que no son propiedad de quien la ha reclamado y obtenido, sino que están a disposición de cualquier ciudadano afectado con alguna discapacidad y que necesite utilizarla”.
En caso de que sea imposible ofrecer un aparcamiento de estas características, la Policía Local, de acuerdo con la persona afectada, intenta facilitar un espacio donde dejar su vehículo “lo más cerca posible de donde lo ha solicitado”, ha agregado el delegado municipal de Tráfico.
En el segundo de los supuestos se encuentran aquellas plazas de aparcamiento reservado que, obligatoriamente, han de existir en las proximidades de los edificios de instituciones de carácter público, como es el caso de los centros de salud, Hacienda, colegios u oficinas municipales. En estos casos no es necesario que un ciudadano solicite una plaza, sino que éstas se establecen por imperativo legal.