El delegado municipal de Medio Ambiente, Joaquín Páez, ha anunciado que la Junta de Gobierno Local ha aprobado en este mes de septiembre el sellado y la clausura del Vertedero de la Victoria. Estas tareas han sido licitadas por la Junta de Andalucía y supondrán un coste de 5.837.086,65 euros. El edil ha señalado que esta actuación “ha sido fruto del intenso trabajo que desde el inicio de esta legislatura venimos realizando, junto con la Junta de Andalucía. Fue el propio alcalde el que se marcó como prioridad este sellado, sobre todo, porque tenemos que garantizar la seguridad y la calidad ambiental”.
Además, ha explicado que La Victoria se cerró en 2008, “con el señor Marín como alcalde y el señor Butrón como delegado de Medio Ambiente. Esto supuso un incremento considerable en la tasa de la factura, porque ahora había que llevar la basura al Centro Medioambiental de Miramundo”. Junto a este hecho, Páez también ha incidido en que sólo se cerró, “sin tener en cuenta la seguridad ambiental y sin tomar las medidas oportunas y definitivas que garantizasen dicha seguridad, así como la calidad ambiental que Chiclana se merecen”.
Páez también ha dejado claro que “hemos podido llegar a dicho sellado y clausura porque no hemos caído en el victimismo ni nos hemos confrontado con la Junta, todo lo contrario. Para hacer las cosas bien hay un truco y se resume en: trabajo, lealtad institucional y buscar la colaboración y no la confrontación. En este sentido, creo que estamos dando sobradas muestras de la labor que venimos realizando y de los frutos que ésta está dando”.
El delegado de Medio Ambiente ha puesto de manifiesto que este sellado forma parte de la estrategia medioambiental del equipo de Gobierno y que se van a tomar otras medidas en esta misma línea, “porque el trabajo realizado en menos de un año está dando muy buenos resultados”. Así pues, “la madrugada del lunes será la última que funcione el punto de acopio de El Carrascal, que también se cerrará, siendo el punto en el que ahora mismo se deja la basura antes de ser llevada a Miramundo. El objetivo sigue siendo el mismo, garantizar la seguridad medioambiental y calidad ambiental. Pero a esto se une la demanda y la preocupación de vecinos de la zona y colectivos, aspecto éste que ha sido fundamental”.
En este sentido, Páez ha aclarado que este cierre supondrá para el Ayuntamiento un aumento en el importe de la factura, que será asumido por el propio Consistorio. “Consideramos que este aumento es una inversión en Medio Ambiente y en salud para las personas”, ha incidido el delegado, que también ha aclarado que “en 2017 habrá una sola tasa de basura en la ciudad, que será de recogida y tratamiento, mientras que en estos momentos existe una por la recogida de basura y otra que tasa consorcial, que el señor Ernesto Marín firmó como alcalde para que se cobrara a la ciudadanía, pero que ya el año que viene no va a existir”.
Otro de los aspectos a tener en cuenta en esta estrategia medioambiental del Gobierno es el aumento de puntos de recogida selectiva de basura, que se ha visto incrementada en los últimos meses hasta en nueve puntos más. “Queremos que el volumen de basura selectiva que recojamos sea mayor. Para ello, trabajamos también con un programa piloto de recogida de restos vegetales, que hemos presentado también a Diputación, con el que disminuir y valorizar dichos restos, porque es mucho el volumen y esto incrementa la factura de basura. Y es que los restos vegetales se pueden utilizar para elaborar otros productos”.
A todas estas medidas se unirá la posibilidad de crear una nueva planta de transferencia. Páez ha explicado que las conversaciones en este sentido están muy avanzadas y el próximo encuentro será la próxima semana en Sevilla. “La intención es que Chiclana tenga una planta de transferencia en las condiciones necesarias para que garantice el servicio de transferencia de basura, así como la calidad ambiental”, ha destacado el edil.
La lista de medidas dentro de esta estrategia ambiental que plantea el Gobierno no se acaba aquí, ya que se está trabajando en la creación de un nuevo punto limpio, que se uniría a los ya existentes en Urbisur y Pelagatos. “Esta tercera ubicación estaría en la zona colindante a la playa”, ha especificado el delegado.
Todas estas actuaciones forman parte de ese plan estratégico en Medio Ambiente del actual Gobierno, cuyos objetivos son claros, garantizar la seguridad y la calidad medioambiental en Chiclana, en beneficio siembre de toda la ciudadanía.