La Junta de Gobierno Local ha dado su aprobación al proyecto de la planta de transferencia de residuos sólidos urbanos (RSU) de La Victoria. La instalación medioambiental contará con un presupuesto base de licitación de 2.989.934 euros y un plazo previsto para la ejecución de las obras de diez meses. Así lo ha anunciado el delegado municipal de Medio Ambiente y Playas, Joaquín Páez, quien ha destacado que la Junta de Andalucía sacará a licitación las obras en breve. La nueva estación de transferencia tendrá capacidad para dar servicio a los municipios de Chiclana y Conil, asumiendo así un carácter supramunicipal.
La infraestructura necesaria se construirá en la parcela del antiguo Vertedero de la Victoria, con la finalidad de permitir la descarga de los camiones de recogida de residuos urbanos, evitando su desplazamiento directo hasta el centro de tratamiento de Miramundo. Páez ha destacado que “las instalaciones cumplirán con todas las expectativas medioambientales y de ahorro económico y medioambiental que nos habíamos propuesto este equipo de Gobierno”.
El edil ha considerado un hecho histórico que “en este periodo corporativo se cierra el ciclo más importante de inversiones en infraestructuras medioambientales para la gestión de residuos llevadas a cabo en la ciudad en su historia. Nunca antes habían concurrido tantos proyectos de gestión e inversión a favor del medio ambiente y en beneficio ciudadano”. Así, ha recordado que “se ha sellado el vertedero de La Victoria; se ha abierto un nuevo punto para la recogida de enseres en Pelagatos y clausurado el punto de acopio de El Carrascal, que no reunía las garantías ambientales necesarias”.
El principal objetivo de esta instalación es el de mejorar los costes de transporte, utilizando equipos adecuados y compactando los residuos para optimizar el traslado hasta el centro de tratamiento, situado en la planta de Miramundo. Las obras de implantación requerirán de una serie de actuaciones que comprenden el acondicionamiento del terreno, la ejecución de obra civil, la instalación de suministros, elementos de urbanización y dotación de maquinaria y equipamiento.
Al describir las características del proyecto, Páez ha afirmado que “la capacidad prevista para la estación de transferencia es de 100.000 toneladas. Actualmente entre Chiclana y Conil, las dos poblaciones que compartirán esta estación, se generan 75.000 toneladas al año. Se ha aumentado el margen de seguridad de tratamiento de residuos en 25.000 toneladas en previsión del crecimiento poblacional”.
La zona de descarga de residuos se organiza en tres niveles. Un primer nivel de RSU; un nivel medio destinado a la fracción de residuos de naturaleza selectiva, y, por último, un nivel de la denominada fracción resto. “Los materiales de recogida selectiva inicialmente admitidos serán los de papel y cartón, vidrio, madera, muebles y enseres, envases y los de fracción resto serán principalmente de poda o jardinería. Estos residuos se seleccionan previamente, con lo que se llevarán menos toneladas al vertedero y el consiguiente ahorro”, ha especificado el delegado.
Los elementos fundamentales que componen la instalación de equipos son una báscula de pesaje de camiones de 60 toneladas, una compactadora de rodillo para voluminosos de madera y restos de poda, dos compactadoras estáticas para fracciones y dos unidades de compactación de RSU formadas por tolva de 80 metros cúbicos con empujador lateral, compactador y mesa de transferencia con transferidor para contenedores. “Con esta maquinaria de última tecnología vamos a garantizar la seguridad medioambiental necesaria; lo cual es indispensable si tenemos en cuenta que Chiclana tiene un patrimonio ambiental incomparable (playas, pinares, marismas). Ahora tendremos también unas instalaciones de gestión de residuos también incomparable, porque van a ser pocas las ciudades de Andalucía equiparables a nuestro municipio”.
Páez ha recordado que “el vertedero de La Victoria se pudo clausurar con ayuda económica de la Unión Europea gracias a que hace años el alcalde, José María Román, consideró prioritario adquirir para la ciudad los terrenos en los que se ubicaba el vertedero de La Victoria. Por la misma razón, ahora se puede instalar esta planta de transferencia; por la visión de un alcalde que se adelantó a los acontecimientos para facilitar que lo que ahora estamos anunciando sucediera”.
Por último, en cuanto a las edificaciones, se proyecta la construcción de un edificio de control y vestuarios para uso del personal. Para la distribución interior se contemplan diferentes estancias según usos, con una sala de control desde la que se gobierne el proceso industrial de la estación de transferencia, dos vestuarios iguales para hombres y mujeres, un almacén y un comedor para el uso del personal.