Nunca es tarde si la dicha es buena. El Cajasur Córdoba de Balonmano sumó, en el último chance que tenía, su primer punto a domicilio en la fase de ascenso a Liga Asobal que disputa 30 años después de la última. Y lo hizo en cuadro, con innumerables bajas y a 550 kilómetros de Fátima, en el Pabellón Municipal Pitiu Rochel. 27-27 empataron los granates ante el Sporting Horneo Alicante con solo doce jugadores en la convocatoria y ante un equipo correoso, que perderá a la mayoría de su estructura el próximo curso, se remodelará y volverá a construir un proyecto serio para luchar por dar el salto a la máxima categoría.
Aitor Gómez (5), Carlos León (5), Jeremy Figueredo (4) y Dani Ayala (4) comandaron el ataque de los cordobeses ante el equipo de Óscar Gutiérrez. Al descanso se llegó con ventaja mínima para los locales (13-12) y en la segunda parte el esfuerzo físico pasaría factura. La igualdad fue la nota predominante durante todo el choque al que se llegó con un ajustado marcador hasta el último minuto. En el ocaso del partido, Ayala y Corning sacaron su magia a relucir y con un 'fly' igualaron el luminoso para rescatar un punto en la novena jornada del play-off.
Este sábado, desde las 19:00 horas, en Ondamezquita 7TV el Cajasur CBM cerrará la temporada en Fátima ante el colista, el Ibiza que derrotó a los de Escribano en la quinta jornada por un ajustado 19-18. Oportunidad, por tanto, de oro para despedirse con el aliento de su afición con una victoria a modo de revancha.
