Las críticas por haber presumido de su felicidad sin tener en cuenta el sufrimiento de Paloma Cuevas cuando el torero rompió su matrimonio en 2020 no han afectado a la pareja, más cómplice y cariñosa que nunca en sus primeras imágenes tras su debut en televisión
MADRID, 7 Jun. (CHANCE) -
Tres años después de confirmarse la separación de Paloma Cuevas y Enrique Ponce, y salir a la luz la relación que el torero mantenía con Ana Soria, la pareja daba un paso al frente y abandonaba su refugio en Almería -donde llevan una vida tranquila alejados del foco mediático- para conceder su primera entrevista conjunta en televisión.
El programa elegido, 'El Hormiguero', donde presumieron de su felicidad y demostraron lo enamoradísimos que están, sin pasar por alto lo complicados que fueron los inicios de su historia de amor y lo que mal que lo pasaron por las críticas que recibieron y la presión mediática que sufieron tras confirmarse su historia de amor.
Un debut televisivo muy cuestionado, ya que Ponce no hizo mención alguna a su exmujer y madre de sus hijas, pasando por alto lo duro que fue para ella su separación después de 25 años de relación, y descubrir que su marido se había enamorado de una estudiante de Derecho 26 años más joven que él. Además, se especula con que esta entrevista podría ser el primer paso para lanzar al estrellato mediático a Ana Soria, que podría estar planteándose comenzar una carrera como influencer o incluso participar, como el torero estaría valorando, en algún concurso tipo 'El Desafío' o 'Masterchef Celebrity'.
Ajenos a las críticas y a los rumores sobre su futuro inmediato, la pareja ha reaparecido en Madrid, donde han pasado unos días para cumplir con algún tipo de compromiso. Ha sido al abandonar el hotel en el que se han alojado para regresar a su casa en Almería cuando hemos visto por primera vez a Enrique y a Ana tras su paso por 'El Hormiguero'.
Cómplices, el torero y su chica compartieron gestos de cariño y confidencias mientras guardaban sus pertenencias en el coche, regalándonos varios besos que demuestran que están en su mejor momento y más unidos que nunca después de su primera entrevista en televisión.
Muy pendientes de sus móviles en todo momento, Ana ni siquiera apartó la vista del suyo para besar cariñosamente al torero, que por su parte aprovechó el tiempo que estuvo esperando a su novia en el parquing para inmortalizar el momento haciéndose un selfie desde su 'lado bueno', mostrando así su faceta más presumido.
Unas imágenes que reflejan el gran momento que atraviesa su relación y que coinciden con las románticas instantáneas de Paloma Cuevas con Luis Miguel en la boda de Daniel, hijo de Rosa Clará, en París este fin de semana. La diseñadora ha recuperado la sonrisa gracias al cantante mexicano y tras varios meses viviendo su amor con la máxima discreción, han decidido dejar de 'ocultarse' y presumir públicamente de la preciosa pareja que hacen y lo enamorados que están.
