Bertín Osborne se ha convertido, con la noticia de su próxima paternidad junto a Gabriela Guillén, en el gran protagonista de la crónica rosa en los últimos días. En el ojo del huracán mediático tras filtrarse el embarazo de su amiga especial -que se encuentra en el primer trimestre de gestación y dará a luz al sexto hijo del cantante a principios de 2024- el presentador rompía su silencio este miércoles confirmando la noticia en 'Es Radio' y reconociendo que, aunque no había sido un bebé buscado sino un accidente, aseguraba que se hará cargo de que a ese niño no le falte de nada, revelando además que la fisioterapeuta y él están distanciados desde hace tiempo.
Horas después, y tras haber recibido fuertes críticas por haber tachado de "accidente" su paternidad, Bertín hablaba por última vez en el programa en el que colabora su exmujer Fabiola Martínez, 'Y ahora Sonsoles', aclarando que su intención fue decir que no había sido un embarazo buscado y dedicando unas preciosas palabras a Gabi, con la que ha revelado que mantenía una relación desde hace casi un año y con la que ha dejado la puerta abierta a una futura reconciliación.
Desde entonces, silencio absoluto. El cantante se refugia en la impresionante finca que posee en Sevilla y, como aseguraba este jueves su gran amigo Martín Pareja Obregón, no piensa salir de casa porque lo único que quiere en estos momentos es relajarse acompañado por su entorno más cercano.
Este viernes, sobrepasado por la expectación mediática que se ha creado en torno a su paternidad -ya que son numerosas las cámaras apostadas a las puertas de su residencia para conseguir sus primeras imágenes tras salir a la luz el embarazo de Gabriela- Bertín ha tomado una decisión que dará mucho que hablar.
Y es que ha llamado a la Policía Nacional para 'denunciar' el acoso que está sufriendo por parte de la prensa y pedir a la autoridad que desalojase el camino que lleva a su finca puesto que, en sus propias palabras, es una "propiedad privada".
Cuatro agentes de la Policía han llegado a la casa de Bertín a media mañana y, tras charlar un rato con uno de sus trabajadores, han accedido al interior de la vivienda para hablar con el cantante, que ha argumentado que algún medio de comunicación habría grabado por encima de la valla, algo ilegal.
Poco después las dos patrullas policiales abandonaban el lugar e 'invitaban' a los medios de comunicación a desalojar los alrededores de la residencia del artista por estar "infringiendo una propiedad privada". Un gesto que deja entrever el nerviosismo de Bertín en estos momentos y sus ganas de mantenerse alejado de los focos tras confimarse que será padre por sexta vez a los 69 años.