Un nuevo repaso del Sevilla al Villarreal ha demostrado que el triunfo en Europa no ha sido cosa de suerte.
El partido, en un ambiente bastante desangelado, espejo de la tristeza que vive la afición castellonense después de la eliminación europea a manos del cuadro de Emery, contagió a sendas escuadras sobre el césped.
No obstante, conforme pasaron los minutos, el choque se abrió y las oportunidades llegaron para ambos equipos. Hasta tres tuvo Bacca para los sevillistas, la más clara de todas tras un centro de Coke por la derecha que el colombiano remató y Asenjo despejó.
Pero fue el Villarreal, en el pie de Moi Gómez, el que tuvo el acercamiento más diáfano para poder adelantarse si su disparo no hubiese golpeado en la cruceta visitante.
Con el cero inicial en el luminoso de El Madrigal, tanto nervionenses como amarillos enfilaron el túnel de vestuarios.
Todo lo contrario sucedió en la segunda mitad; y como suele ser parece estar escrito, este Sevilla le tiene tomada la medida a este Villarreal. Mención especial a la jugada en la que Diogo, con un pase de tacón a Coke, elaboraba la jugada del primer tanto sevillista en el minuto 48, con el que los de Emery conseguían perforar la meta adversaria.
Para dar carpetazo al asunto, Vitolo en el 64, sentenciaba el encuentro y una serie de cuatro partidos sin que el Villarreal haya rascado un solo punto a los de Nervión. Un Sevilla que se asegura prácticamente su próxima participación europea vía Liga.
Emery: "Esta victoria tiene mucho valor"
“Esta victoria tiene mucho valor. Aquí sólo habían ganado Madrid, Barcelona y Valencia, por lo que es un campo difícil", expresó el técnico vasco. Mientras Marcelino no daba crédito tras la derrota: "Además del juego hay que tener de tu lado la suerte y creo que el Sevilla hoy ha tenido fortuna para acabar venciendo”, dijo en rueda de prensa tras el partido.
Entre Vitolo y San Petersburgo anda el juego
Sin duda las dos noticias del fin de semana en torno a la actualidad sevillista, pues a lo largo del viernes, se conoció la convocatoria del canario por parte de Vicente del Bosque para vestir la camiseta de la selección española; así como el próximo rival europeo, el Zenit ruso, en los cuartos de final de la Europa League.