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Casi 4.300 firmas apoyan que el piso asistido no se cierre

En estos momentos hay tres mayores y una gerocultora por cada turno, encargándose de la comida, la limpieza y el cuidado de estos

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  • Parte de la plantilla entrega las firmas. -

Las trabajadoras del piso asistido, apoyadas por el Foro Social, han presentado esta mañana en el registro municipal del Consistorio casi 4.300 firmas ciudadanas que están en contra del cierre del piso asistido. Pepi Mangano, en nombre de la plantilla, indica que “cuando nos enteramos del cierre nos echamos a la calle para pedir apoyos, hace algo más de un mes”, puesto que están en peligro 17 plazas para mayores y 16 puestos de trabajo.

“Estamos orgullosas porque hemos concienciado a la ciudadanía de lo importante que es este recurso y que no se pierda”. No entienden además “cómo los recortes siempre vienen a los más indefensos, en este caso los mayores, habiendo incluso problemas con el servicio de ayuda a domicilio”, explica. Elías Py, representante del Foro Social, confirma que “como son unos cuantos votos, porque los mayores que tienen problemas no votan, no les importan”.

Mangano explica que están inmersas en un ERE (Expediente de Regulación de Empleo( desde el 15 de mayo, y desde entonces la empresa, Assistel, ha dejado el piso asistido sin miembros de limpieza y cocina, por lo que en estos momentos, en los que quedan tres ancianos en el piso asistido, hay 8 gerocultoras (porque una está de excedencia y una ha cogido un puesto de guardería ofertado por la misma empresa y otra deja de trabajar mañana”. Por tanto, “hay una gerocultora por turno, encargándose de la limpieza, la comida, que llega por catering pero hay que prepararla, y del cuidado personal de los abuelos”.

Pepi Mangano confirma que “vamos a seguir peleando para mantener este recurso o por una alternativa”, indicando que han conseguido que el alcalde, Enrique Moresco, las reciba la próxima semana, y dependiendo de su respuesta, continuarán tomando decisiones relativas a las acciones a llevar a cabo.

Otra de las trabajadoras asegura que el piso asistido cuenta con los sellos de calidad y los permisos necesarios, recordando que desde el Consistorio se habló de que no había condiciones idóneas para dejarlo abierto o concertar las plazas, poniendo de ejemplo el edificio del Ayuntamiento, que a su entender no cumple todos los requisitos, entre ellos el de movilidad, y “se va a abrir otro, pues lo mismo deberían hacer con el piso asistido”.

Lo que esperan de dicho encuentro es que “nos busquen una alternativa, porque hemos presentado propuestas que creemos que ni se han leído e intentar no perder este recurso, porque estamos de acuerdo en que estamos en una situación de crisis, en las que los recortes se hacen inevitables, pero no para cerrar esta residencia”. Así, en cuanto a la propuesta que han realizado, asegura que “queremos sentarnos a negociar, porque estamos dispuestas a no cobrar nocturnidad, días festivos o recortar nuestros horarios con tal de no quedarnos sin trabajo y sin este recurso”. Recuerdan que “dijeron que iban a intentar la reincorporación de la plantilla a otros puestos, pero en el último Pleno nos dijeron que no había opción, por lo que lo dicho hasta entonces es mentira”, entienden.

Py indica que la mayoría de las firmas recogidas salen de las personas más concienciadas con este asunto, de mayores que están en residencias o en centros de día. “El Ayuntamiento actúa como los monos de Gibraltar, ni oyen, ni ven ni hablan”. A pesar de que se cierre o no “el Foro va a seguir peleando para que la asistencia exista. Ya hay muchos ancianos que no encuentran plazas y están acudiendo a Diputación”, por lo que considera que la demanda es considerable como para replantear el cierre.

Pero también considera que la Junta es responsable de esta situación, pues “no construye residencias y lo dejan todo en manos de la empresa privada, que dicen que sale más barato, pero hay que tener en cuenta que tienen que sacar beneficios, por lo que no entendemos la lógica. Estamos en contra y pedimos que la administración no sea tan rigurosa a la hora del cumplimiento de la legislación para que se puedan mantener los servicios”.

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