Atado y bien atado. El Recreativo Portuense, tal y como informamos el martes 28 de mayo, tiene un compromiso verbal con el Ayuntamiento que le asegura poder disfrutar de las instalaciones y poder compartir, en el peor de los casos, el convenio del que sí tiene recogido mediante contrato la entidad racinguista hasta 2041.
En caso contrario, es decir, ser el único equipo, igualmente, tendría vía libre para poder continuar disputando sus encuentros como local sin mayores problemas.
El todavía segundo equipo, no solo ha conseguido arrancar ese acuerdo institucional, sino que también ha querido recoger y evitar una hipotética 'guerra civil' en el que pudiera salir mal parado y acabara fuera de las instalaciones por una u otra razón.
Para esquivar futuras tentaciones ante unas malas relaciones entre unos y otros, bien producida por la llegada de un grupo exterior que considerase incompatible la dualidad que en la actualidad disfrutan o por cualquier otro inconveniente, a preferido prever un problema mediante el pacto institucional.
Hoy por hoy es una postura a todas luces imposible que se pudiera dar, ante la situación actual que viven los dos clubes. La dimisión de ambas directivas ha dejado mermada a las dos juntas. La dimitida junta abandonó, en buena parte, para incorporarse a la junta gestora racinguista. Renunciados de sus cargos el pasado miércoles, el Recre se encuentra a la espera de convocar elecciones en fechas próximas.
Dicho de otra manera, el Recreativo Portuense se asegura seguir disputando los partidos en el José del Cuvillo a pesar de una llegada ‘incómoda’ que intentara desalojar a estos de las instalaciones.
