La Feria de Primavera y Fiesta del Vino Fino ha echado su cierre oficial, y el recinto ferial Las Banderas comienza a convertirse en un “desierto”, tras el desmontaje de las casetas y la recogida de residuos y basura. A falta de un resultado y balance definitivos por parte de los caseteros, la primera impresión es que ha sido una Feria de buenos resultados, a pesar de que la climatología no ha ayudado, puesto que se ha tratado de una Feria fría y con días de lluvia, “algo que no nos gusta ni a los caseteros, porque vemos cómo la gente empieza a huir a su casa, ni para quien quiere disfrutar de la Feria, claro está”.
Incluso este medio ha podido saber, a través de caseteros recién estrenados en esta edición de la Feria que, el resultado ha sido el esperado e incluso se han superado las expectativas puestas en esta primera toma de contacto con Las Banderas.
Sin duda, incluso el lugar que ocupan algunas casetas, ha servido para que los números hayan sido mejores de lo que esperaban. Los días más complicados fueron el miércoles de la velada, que tras el alumbrado oficial la lluvia hizo acto de presencia, y el sábado, que se esperaba lluvia, y ésta se hizo sentir, “dejando la Feria bastante desolada”, indica un casetero. Pero no solo las casetas se quedaron desiertas.
El recinto ferial se enfangó, según explican algunos feriantes, y hubo casetas, como la municipal, que se llenaron de incómodas goteras que hicieron que muchos clientes tuvieran que abandonar las instalaciones o buscar otro espacio en el que acomodarse. Hubo quien se pertrechó en las casetas, y otros prefirieron abandonar el recinto ferial.
Este martes comenzó el desmontaje oficial. Muchas atracciones comenzaron a desmontarse en la noche del lunes, y las demás fueron recogiendo a lo largo de la mañana del martes, mientras la empresa Ximénez se hacía cargo de los arcos y decoración del alumbrado, trabajos que por la mañana estaban bastante avanzados. Que este martes amaneciera “fresquito”, según explican los operarios, feriantes y caseteros, ayudó a que en el hueco de la mañana pudieran recoger bastante, ya que otros años el calor impide trabajar con presteza, y la imagen a la hora del almuerzo fuera prácticamente de toldos vacíos, llenos de farolillos o bolsas de basura, tarea de recogida que tiene que ir realizando las brigadas municipales del área de Medio Ambiente, volcada totalmente en esta función en las próximas jornadas, para dejar el recinto ferial el buenas condiciones de limpieza. Los caseteros que en la noche del lunes no dejaron desmontadas las instalaciones, aprovecharon la festividad de este martes, pudiendo contar además con más ayuda, puesto que hay mucha gente con días de descanso.