Tras el intenso Congreso Regional del PSOE celebrado este fin de semana, las reacciones sobre el mismo en la provincia difieren, evidentemente, según quién las efectúe. En este sentido, el secretario provincial del PSOE en Cádiz, Francisco González Cabaña, afirmó ayer que “Cádiz es más griñanista que Griñán”, advirtió “a quien pueda sentirse voz crítica” que “no habrá ni congreso provincial extraordinario ni va a haber gestora” e insistió en que la decisión de renunciar a la Ejecutiva Regional fue por “un condicionante de tipo personal”, como era el tener que dejar la Alcaldía de Benalup-Casas Viejas, lo cual "no haría en la vida".
González Cabaña recordó que la delegación de Cádiz apoyó “de manera clara” a José Antonio Griñán y su candidatura, por lo que manifestó que “no se pueden hacer elucubraciones interesadas en relación con el apoyo a Griñán” y afirmó que “Cádiz está muy bien situada en la Ejecutiva Regional”. En este sentido, tras recordar que “durante muchos años” han tenido a Luis Pizarro, al que calificó como “el mejor político de España”, señaló que ahora tienen “secretarías muy importantes” en “políticas necesarias” para la provincia.
Además, añadió que las personas de la delegación gaditana que forman parte de la Ejecutiva son “proyectos políticos de Cabaña”, incluida la ministra de Igualdad, Bibiana Aído, que “inicia su andadura orgánica de la mano de González Cabaña”. Por ello, tras insistir en que “son gente de Cádiz y de la confianza de Griñán”, aseguró estar “contento” con la inclusión de estas personas en la Ejecutiva.

El porqué de su renuncia

En cuanto a su renuncia, explicó que se hizo un planteamiento para estar en el “núcleo duro” de la organización del partido, el cual “después” implicaba renunciar a los cargos que actualmente ostenta. En este sentido, señaló que para renunciar al cargo de secretario provincial “tenía que saber qué pensaban los compañeros”, mientras que para el de presidente de Diputación “no tendría inconveniente”.
No obstante, uno de los cargos al que más apego ha mostrado desde el pasado sábado es al de alcalde de Benalup-Casas Viejas, del que dijo que no renunciaría “en la vida”, por lo que aseguró que en su renuncia a la Ejecutiva Regional “hay un condicionante de tipo personal”, así como el “respeto a los compañeros” de la ejecutiva provincial, que según indicó, no querían que renunciara al cargo de secretario provincial.
González Cabaña aseguró que “no hay más razones ocultas” en su renuncia a formar parte de la Ejecutiva Regional, por lo que instó a “que nadie busque otras historias”.
Asimismo, manifestó que en la jornada del domingo recibió muchas llamadas, incluida la del propio José Antonio Griñán, al que, según aseguró, le trasladó su “disponibilidad” y recibió a cambio el “cariño” del nuevo secretario general del PSOE-A.
En cuanto a la voces críticas, González Cabaña manifestó que el PSOE es “un partido donde todo el mundo es libre”, por lo que respeta las voces críticas y los que piensen de otra manera, pero les instó a “que lo digan” y “no busquen subterfugios” en foros que no se deben usar para eso, como los medios de comunicación. Así, recordó que “quien gana los congresos tiene el derecho a tomar sus decisiones y quien los pierde tiene el derecho a la crítica”, pero en los foros existentes para ello.
Y sobre si su decisión podrían tener consecuencias políticas, González Cabaña dijo que “eso se da en los partidos que usan el dedazo”.

“Pérdida de peso” de Cádiz

Sobre el Congreso socialista también habló ayer el presidente provincial del PP de Cádiz, José Loaiza, quien lamentó la “pérdida de peso” de la provincia dentro de la Ejecutiva regional del PSOE-A, ya que “no hay quien la defienda” con la marcha de Luis Pizarro y Manuel Chaves, y tras el rechazo del secretario provincial socialista, Francisco González Cabaña, a la Secretaría de Política Institucional.
Loaiza dijo no saber “si felicitar o dar el pésame” a González Cabaña y al PSOE gaditano tras el Congreso Extraordinario del PSOE-A, que está “cerrado en falso”, ya que, en su opinión, los socialistas andaluces siguen teniendo “los mismos problemas que antes de que Griñán fuese su secretario general” y aseveró que el citado congreso fue un “verdadero fracaso” para la provincia gaditana por su “clara pérdida de peso” en la Ejecutiva regional. En este sentido, consideró que González Cabaña “no ha calculado bien, no sabemos si su entrada en la Ejecutiva o las consecuencias que la entrada tenía”, dijo en alusión a que esto exigía el abandono de la secretaría provincial del PSOE, la Presidencia de la Diputación y la Alcaldía de Benalup-Casas Viejas.
El dirigente popular destacó que el PSOE está “dividido” en Andalucía porque “no cuenta con el respaldo” de su presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, que “castiga permanentemente a la región”, y señaló como ejemplo el pago de la deuda histórica. Del mismo modo, aludió a un PSOE “dividido” en la provincia de Cádiz, ya que González Cabaña argumentó que “prefería quedarse con los suyos porque se lo habían pedido” y, sin embargo, Loaiza aseguró que “han salido socialistas gaditanos diciendo que no le habían pedido nada”.
Por ello, Loaiza dijo que no pedirá la dimisión a Cabaña por esto, aunque sí consideró que “tendría que haber elegido la Secretaría regional porque Cádiz ganaría con su marcha de la Presidencia de Diputación, desde luego” y apuntó que “el PSOE de Cádiz está tocado” y el “responsable” de ello es Cabaña, quien “tiene que estar preocupado porque ni los suyos le han defendido”.

“Aunque la mona se vista de seda...”

La diputada nacional del PP y alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez, aseguró que el episodio protagonizado este fin de semana por Francisco González Cabaña, es “un exponente más de que los socialistas andaluces sólo piensan en ellos personalmente y en sus proyectos personales y políticos”.
Lo que, a su juicio, está claro es que “no es todo tan color de rosa como ellos nos lo quieren pintar”, dijo en alusión a los socialistas, señalando que en Andalucía “tenemos un problema muy agudizado con respecto al resto de España y Europa con motivo de la crisis”. Según dijo, esto demuestra que “aunque la mona se vista de seda, mona se queda”, al igual que ocurre con el PSOE andaluz “por mucho que hayan cambiado de presidente y que vayan a cambiar de Ejecutiva”, ya que durante 30 años de gobierno en la comunidad autónoma “no han sido capaces de cambiar los problemas estructurales de esta sociedad”, apostillando que “han tenido tiempo suficiente”.