Se han cancelado 10.000 vuelos por el problema de la nube volcánica
El presidente de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA), Juan Ignacio Lema, subrayó este jueves que la red española está funcionando "al 100% prácticamente", después de que se hayan cancelado entre 9.000 y 10.000 vuelos entre España y la zona afectada, el 10% de los anulados en todo el mundo, unos 100.000.
En declaraciones a Onda Cero recogidas por Europa Press, Lema explicó que tan sólo existen restricciones "muy parciales" en cuatro países Reino Unido, Suecia, Noruega y Finlandia, mientras que en el resto de Europa los cielos "están abiertos", con lo que prácticamente puede decirse que este jueves se ha recuperado la normalidad operativa, siete días después de la erupción del volcán.
Lema admitió que el volumen de anulaciones para todos los sectores implicados en el transporte ha supuesto un perjuicio importante tanto para compañías aéreas, como aeropuertos y empresas vinculadas al turismo, que se añade al de los pasajeros que han tenido que interrumpir sus viajes y han sufrido estas "perturbaciones y molestias".
Preguntado por las críticas vertidas por algunas aerolíneas sobre el excesivo celo en el cierre de los aeropuertos, Lema dijo no compartir esta visión y afirmó que las autoridades europeas han dado prioridad al principio más fundamental en el transporte aéreo como es el de la seguridad con sus decisiones.
"Ante la duda y la falta de datos que permitan tomar una decisión garantizando al 100% la seguridad es decir, sin ninguna duda de que el pasajero va a volar seguro, creo que se debe hacer lo que se ha hecho", recalcó.
Para Lema la decisión de para los vuelos si esa seguridad absoluta es la correcta y ha venido marcada por el desarrollo de los acontecimientos desde que empezó la crisis por parte de Eurocontrol, el organismo encargado de velar por la seguridad y la coordinación del espacio aéreo, entidad integrada por los Estados europeos.
Lema recordó que los expertos de Eurocontrol analizaron con los datos disponibles, fundamentalmente del centro vulcanológico británico y de las distintas fuentes técnicas y científicas, y fueron ellos los que evaluaban el impacto de la nube de cenizas sobre el tráfico aéreo puntualmente.
"Los países tomaron la decisión cuando obtuvieron la información técnica de Eurocontrol, el pasado lunes, que ya establecía por primera vez tres áreas una con vuelos absolutamente prohibidos por la densidad de la nube de cenizas, otra donde estaban permitidos por la inexistencia de cenizas y una tercera donde la contaminación era mejor y dejaba a los Gobiernos el estudio de posibles pasillos", explicó.
En base a esta situación, Lema opinó que las medidas aplicadas por la UE fueron "rápidas" desde el momento en que se tenía dicha información.