En una operación conjunta entre el equipo del Seprona perteneciente a la Guardia Civil y los inspectores pesqueros de la Junta de Andalucía, se han intervenido 651 kilos de pescado inmaduro, que no supera la talla mínima para su venta y distribución.

La incautación se ha producido en uno de los controles reglamentarios que la Guardia Civil realiza en puntos estratégicos de paso hacia Mercasevilla establecidos en el Paciap (Plan Anual sobre el Control Integral de Actividades Pesqueras).

En uno de estos controles situado en la A49, la Guardia Civil ha interceptado una furgoneta procedente de Huelva con 492 kilos de lenguado de talla antirreglamentaria.

El resto del pescado, que tampoco superaba la talla mínima exigida fue detectado en el Barranco de Mercasevilla, donde se han decomisado 138 kilos de merluza y 21 de coquinas.

La Guardia Civil ha procedido a formular las tres denuncias correspondientes por infracciones a la ley de Pesca Marítima, tras detectar este tipo de pescado que no puede ser extraído del mar con el fin de perpetuar la conservación de las especies marinas.

Una vez incautado, el pescado ha sido trasladado a las dependencias de Mercasevilla habilitadas para este cometido. Si los veterinarios de la Junta de Andalucía determinan que el producto es acto para el consumo humano, el pescado se enviará al Banco de Alimentos desde donde se distribuirá a instituciones benéficas.