"Si gano me presentaré a las primarias para ser candidata porque vamos a unas primarias abiertas, a acercarnos a la gente y si pierdo me pondré a disposición de quien gane pero no seré un estorbo para mi partido", ha dicho en una entrevista en RNE recogida por Europa Press. Sin embargo, preguntada si eso implica que no se presentaría a las primarias se ha limitado a responder: "Eso está muy lejos".
Si es elegida secretaria general, ha explicado que se presentará porque el PSOE tiene que tener una "alternativa ya", "sin transiciones y sin interregnos" aunque luego ha aclarado que el momento de las primarias lo decidirá el partido. Además, ha insistido en que su único temor es "hacerle daño" al PSOE, que ese fue el motivo por el que no se presentó a las primarias hace siete meses y es también el motivo de presentarse ahora: "Hoy le estaría haciendo daño a mi partido si no fuésemos capaces de reaccionar".
Chacón ha afirmado que está "dispuesta" a responder a la demanda de "más participación" que están defendiendo los militantes cuando piden cambiar la forma de elección del secretario general para que no le voten sólo los delegados a un Congreso, sino todos los militantes en voto directo y secreto. Así lo piden un total de 189 enmiendas presentadas a la ponencia marco del 38 Congreso.
Sin embargo, ha asegurado que ella no lleva esta propuesta "directamente" porque eso sería "desautorizar" a los delegados que van a acudir al Congreso. Otros colaboradores y partidarios de Carme Chacón, como el alcalde de Soria, Carlos Martínez, o el exministro de Exteriores Miguel Ángel Moratinos sí lo han reclamado abiertamente.
La exministra ha relatado que habla a menudo con el expresidente del Gobierno y secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, pero sobre todo de la situación económica y del "engaño" del jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy a los españoles, y menos del Congreso. Eso sí, ha contado que Zapatero le pregunta qué tal le va y que la ve "contenta". A juicio de Chacón, el proceso precongresual "es bonito" porque es un ejercicio de democracia y de libertad, incluso la mera campaña está siendo una "palanca de movilización".
NO HA PREGUNTADO A GONZÁLEZ A QUIÉN APOYA
En cuanto al otro expresidente socialista, Felipe González, ha asegurado que no le ha preguntado "con quién está" en la carrera socialista, y ha optado por replicar: "yo le apoyo a él" y destacar que en la actual crisis mucha gente está "sostenida" por el "colchón" de Estado de bienestar que construyeron González y ministros de sus gobiernos como Ernest Lluch.
La aspirante no ha desvelado quién estaría en su Ejecutiva si es elegida secretaria general ni quién sería su número dos, pero sí ha reiterado que le ofrecería un puesto a Rubalcaba, "donde él quiera". Dada su "hoja de servicios impecable", ha dicho que hacia él sólo tiene "buenas palabras" y ha dado la misma respuesta que hace semanas a la opinión de su contrincante de que ella no es la solución para este momento del PSOE: "Serán los delegados quienes decidan qué es lo mejor".
En cambio, preguntada por la posibilidad de una candidatura conjunta, ha dejado claro que cada uno tiene su proyecto y que el de ella es de "revitalización" del proyecto socialista, de participación y de "abrir puertas y ventanas" a los ciudadanos, de "coherencia" -"si decimos primarias hacemos primarias", de rendición de cuentas y de ser "tajantes contra la corrupción".
NO SE PUEDE DECIR "NO HA PASADO NADA"
A su modo de ver, el PSOE tiene que acercarse a los ciudadanos con "liderazgos fuertes y direcciones colegiadas" y sólo debe tener miedo "al inmovilismo y a no responder, a decir aquí no ha pasado nada". "Llevamos tres avisos duros -ha dicho aludiendo a las derrotas electorales_y yo no quiero un cuarto, quiero que Andalucía sea el principio de la recuperación".
Su baza frente a Rubalcaba, ha dicho, es su proyecto: "Yo tengo mi proyecto para el PSOE y también para toda España y tengo la convicción de que el partido, sin transiciones y sin interregnos, debe ponerse cuanto antes en pie y poner alternativa".