El responsable del Área Institucional del PNV, Koldo Mediavilla, ha señalado de que la "ofensiva centralizadora que se adivina para octubre" por parte del Gobierno central "presagia lo peor" y ha advertido al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de que "si en Euskadi se mantiene el pulso y sigue sin tener en consideración las primeras luces de alarma que avanzan un desarraigo creciente, estallará con toda crudeza". "Con tanta o más fuerza que en Cataluña", subraya.
En una entrada publicada en su blog, recogida por Europa Press, el dirigente jeltzale ha señalado además que afirmar que la balanza fiscal de Euskadi respecto a España "nos beneficia, es simple y llanamente un argumento bendecido para que se intente una modificación expresa del Concierto Económico y de la fórmula que establece el pago del Cupo al Estado".
Tras destacar que desde que Mariano Rajoy asumiera la presidencia del Gobierno el proceso de recentralización ha sido "una constante en su gestión", critica que "no ha habido decreto ley ni proyecto normativo que haya alumbrado que no haya invadido ámbito competencial del Estatuto vasco".
"Pero la amenaza de horadar los cimientos del autogobierno vasco se enfrenta, pasado el verano, a una ofensiva que advierte alta tensión política. La pretensión de modificar la ley electoral, a escasos meses de celebrarse las elecciones municipales, forales y también autonómicas en muchas comunidades, augura un cambio unilateral en las reglas de juego democrático", alerta.
Asimismo, destaca que el Ministerio de Economía y Hacienda pretende impulsar un listado de "225 nuevas medidas de control del gasto público". "Recortes y más recortes que, de aprobarse, afectarían directamente al margen de maniobra del Gobierno vasco", añade.
En este contexto, remarca que la "ofensiva centralizadora que se adivina" para otoño presagia "lo peor". "En Cataluña, el cepillado del Estatut y la desatención permanente de un problema latente provocó el hartazgo social que, más allá de reivindicaciones identitarias, se sintió desafecto, desvinculado de un Estado que les ignora y en el que creen que seguir unidos les perjudica en lo personal y en lo colectivo", ejemplariza.
Por ello, Mediavilla defiende que si en Euskadi "se mantiene el pulso" y el presidente Mariano Rajoy "sigue sin tener en consideración las primeras luces de alarma que avanzan un desarraigo creciente, el problema estallará con toda crudeza". "Con tanta o más fuerza que en Cataluña", insiste.