El ministro de Exteriores en funciones, José Manuel García-Margallo, ha advertido este lunes al PSOE de que "en política no se debe decir nunca jamás" y ha añadido que "ayudar a gobernar siempre tiene premio", mientras que "poner palos en las ruedas siempre tiene castigo, como se ha visto".
Como ejemplo de ese "premio", ha mencionado los 202 escaños que obtuvo el socialista Felipe González en 1982, después de "ayudar a la gobernabilidad en la época de Calvo Sotelo, prestando apoyo en una situación difícil".
Margallo se ha expresado así, en una entrevista en Antena 3, recogida por Europa Press, después de que el Comité Federal del PSOE haya confirmado que votará en contra de la investidura de Mariano Rajoy. No obstante, el ministro en funciones ha distinguido entre el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, y el partido, afirmando que éste "tiene 137 años de historia y siempre ha estado dispuesto a colaborar para resolver los problemas reales de país".
Así, ha avisado de que "la destrucción del PSOE es más probable si en un momento de auténtica necesidad nacional el PSOE se niega a poner el hombro por miedo a perder la hegemonía con Podemos". Es más, cree que la forma en la que el PSOE puede distanciarse de Podemos es "demostrar que puede ser alternativa de gobierno y ser alternativa seria es ponerse a trabajar en algo serio".
Margallo ha afeado a los socialistas que apuestan por un Gobierno de Sánchez --entre ellas la presidenta balear, Francina Armengol, que ha sido entrevistada en el mismo programa-- que estén dispuestos a pactar con Podemos, ERC y Bildu y no con el PP.
A su modo de ver, lo que tiene que pasar es definir cuáles son los desafíos y los problemas de España, que el PSOE esté dispuesto a escuchar a las ofertas de Rajoy, y éste las contrapropuestas de los socialistas. "Eso es como se funciona", ha dicho, y ha precisado que un acuerod de "gran coalición" no implica necesariamente que el PSOE entre en el Gobierno, sino que podría dar apoyo parlamentario.
Margallo ha dicho que no podía decir si Rajoy ha llamado o no ya a Pedro Sánchez, pero sí que el presidente "está dispuesto a llamar" y "su disposición para hablar con Pedro Sánchez es permanente e incondicional", pero "en la otra parte no parece que haya una reciprocidad muy evidente". "Para el tango se necesitan dos, y si uno no coge el teléfono...", ha dicho.
A su modo de ver, España no debería dejar pasar la oportunidad de llegar a grandes acuerdos, como en la Transición, para hacer grandes reformas, y ha insistido en que para hacerlas sería muy conveniente un acuerdo con PSOE y Ciudadanos.
BIEN CON C'S PERO NO CON PNV POR LAS ELECCIONES VASCAS
En cuanto a Ciudadanos, ha afirmado que tampoco sabe si Rajoy se ha reunido ya o ha llamado personalmente a su presidente, Albert Rivera, pero está convencido de que cuando ambos se vean --este martes en la Moncloa-- las cosas irán bien, porque cree que "las diferencias son tan pequeñas" entre ambos partidos que no es posible que no sea así.
Es más, ha dejado claro que él es partidario de un Gobierno de coalición. En cuanto al PNV, ha afirmado que hay "diferencias importantes" y un horizonte electoral, en otoño, que dificulta el acuerdo a corto plazo.
