La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha denunciado este martes las presiones y coacciones que han recibido trabajadores y responsables de hoteles como en Pineda del Mar (Barcelona) para expulsar a los agentes bajo amenaza de cierre del establecimiento. Según ha recalcado, el Ejecutivo del PP no va a tolerar esos comportamientos "mafiosos de los ayuntamientos en Cataluña".
Así se ha pronunciado Santamaría tras inaugurar la tercera edición del Summit Shopping Tourism & Economy, en la que ha leído textualmente un mensaje que recibió anoche de la Guardia Civil: "Debido a una reunión que hemos tenido con responsables del ayuntamiento de Pineda del Mar, nos vemos obligados bajo amenaza de cerrarnos los hoteles durante cinco años, a desalojar el contingente de policías nacionales de nuestros hoteles".
Según la vicepresidenta del Gobierno, "esto es un comportamiento mafioso". "Y no vamos a tolerar comportamientos mafiosos de los ayuntamientos en Cataluña", ha afirmado rotunda, para añadir después que el Gobierno que dirige Carles Puigdemont y los independentistas han perdido "cualquier vergüenza democrática".
Precisamente, la Fiscalía General del Estado está analizando si procede iniciar actuaciones penales respecto de las expulsiones de miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado que se produjeron este lunes en diferentes hoteles de Cataluña. Tras recibir la información sobre estos hechos, el Ministerio Público estudia si existen indicios de amenazas u otras presiones ilegales sobre los responsables de esos locales o los trabajadores de los mismos.
Sáenz de Santamaría ha cargado duramente contra el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, y sus socios, a los que ha acusado de "echar a sus seguidores a la calle para impedir" que se cumpla la ley y se respete la Justicia. Sin embargo, ha asegurado que el Gobierno del PP está para "defender los derechos y las libertades del conjunto de los españoles, que han sido sistemáticamente pisoteados por la Generalitat".