La portavoz del Partido Popular en el Congreso de los Diputados, Cayetana Álvarez de Toledo, exigirá este martes en la Junta de Portavoces la "reapertura inmediata" de la Cámara Baja para poder recuperar las sesiones de control semanales al Gobierno a partir de la próxima semana.
Además, el Grupo Parlamentario Popular ha presentado un escrito en el que reclama que se levante la suspensión del cómputo de plazos de tramitación de iniciativas acordado por la Mesa del Congreso, según recuerda el PP, el pasado 19 de marzo.
Así, los 'populares' han asegurado que la Mesa "se habría excedido en sus competencias y habría vulnerado los derechos de representación política de los diputados". Por ello, han avisado de que, en caso de no atender su petición, recurrirán al Tribunal Constitucional.
En esta línea, y con el fin de lograr la reapertura del Congreso, el PP aprobó este lunes su plan para la reapertura con peticiones y críticas al Ejecutivo estructuradas en nueve puntos diferentes. El primero de ellos reafirma que, en una democracia parlamentaria, los diputados son "esenciales".
CERRAR EL CONGRESO "ES ANTIDEMOCRÁTICO Y ANTICONSTITUCIONAL"
"No somos de mejor condición que los médicos, enfermeras, policías, guardias civiles, cajeras de supermercado, ni nuestra función es menos importante. Tenemos más responsabilidad que todos ellos. El Gobierno nos está negando nuestro derecho a ejercer nuestro deber. Esto es antidemocrático. Y esto es anticonstitucional", asegura el segundo punto.
Con esta convicción, el PP anunciará a la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, que al próximo pleno acudirán hasta 45 diputados 'populares' "guardando un metro de distancia" --un escaño-- entre uno y otro.
"Es hora de que los españoles nos vean. Es hora de que sepan que los diputados del Partido Popular trabajan en primera línea. No sólo en defensa de sus votantes. En defensa de todos los votantes, de la Nación", defienden.
De esta forma, el PP pondrá fin al "pacto de caballeros" que los partidos habían alcanzado con la propia Batet, con quien se comprometieron a reducir la asistencia de sus parlamentarios a "un puñado".
LA CÁMARA BAJA NO SE CIERRA "NI EN CASO DE GUERRA"
En este sentido, el plan del partido presidido por Pablo Casado sostiene que el PP fue la primera formación en recordar que el Congreso "no se cierra ni en caso de guerra". "A más alarma, más control. A más poder excepcional del Poder Ejecutivo, más vigilancia por parte de la soberanía nacional", añade el texto.
Así, el PP ha lamentado que la "previsión constitucional" no se esté cumpliendo y que el jefe del Ejecutivo haya puesto "la democracia en cuarentena". "Y lo peor: no es una cuarentena propiamente dicha, con fecha de caducidad, sino una cuarentena sine die", aseguran.
Las críticas de los 'populares' se intensifican más aún en el cierre "en seis actos" del Congreso de los Diputados, que, según recuerdan, comenzó con la supresión del control del Gobierno, las preguntas el Ejecutivo y, finalmente, con la incomparecencia de Sánchez.
Por todo ello, la formación defiende su plan para la reapertura, que se estructura en seis actos, incluyendo la celebración de plenos y comisiones de forma presencial combinado con el voto telemático. Asimismo, exigen que las sesiones de control se reanuden después de Semana Santa.
REANUDAR LAS SESIONES DE CONTROL DESPUÉS DE SEMANA SANTA
Adicionalmente, el PP exige la puesta en funcionamiento de todas las comisiones del Congreso y la comparecencia de los miembros del Comité Técnico para el coronavirus. "Sólo sabemos que su cabeza es el doctor Simón, cuya impericia en la anticipación de la crisis y en su gestión científica posterior ha quedado dramáticamente acreditada", añaden.
En este sentido, los 'populares' también reclaman que el Gobierno responda a todas las preguntas, que ponga en marcha de los plazos para presentar enmiendas a los decretos tramitados como proyectos de Ley y que Sánchez comparezca la semana que viene ante el Congreso para dar cuenta de la reunión informal del Consejo Europeo.
Además, el partido que lidera Casado insta al Ejecutivo a poner a "disposición todos los medios precisos" para permitir la celebración "de ruedas de prensa de verdad" en el Congreso. Según han recordad, esto sería posible toda vez se celebran "ruedas de prensa fake en el Palacio de la Moncloa".