Agentes de la
Policía Nacional junto a la Policía del Cantón de Ginebra han
desmantelado varias plataformas online de falsas inversiones en criptomonedas con las que presuntamente
habían estafado a más de 150 personas. La investigación se ha iniciado tras
solicitud internacional de colaboración de las autoridades policiales de Suiza, quienes
detuvieron al líder de la organización en un viaje a dicho país. En la localidad malagueña de
Estepona se ha llevado a cabo una entrada y registro en el domicilio donde residía el líder y han sido intervenidos 21 vehículos y un yate.
La investigación se inició el pasado mes de
agosto tras la recepción de una solicitud internacional de colaboración por parte de la Policía del Cantón de Ginebra para la
localización de las propiedades y ejecución de una entrada y registro en el domicilio del responsable de
varias plataformas online de falsas inversiones en criptomonedas. A través de estas plataformas consiguió estafar a más de 150 víctimas en Suiza y otras tantas en otros países, lo que le
generó unos beneficios de millones de euros que le han permitido disfrutar en España de un nivel de vida elevado.
Intervenidos 21 vehículos y un yate
El responsable de estas plataformas fue detenido en un viaje a Suiza por las autoridades suizas, si bien
residía con su pareja en la localidad malagueña de Estepona. Fruto de esta solicitud de colaboración, se realizaron gestiones que permitieron localizar e identificar todas las
propiedades que ambos poseían en España, adquiridas presuntamente con los beneficios procedentes de la actividad.
Utilizaban la imagen de personas conocidas
En cuanto a las plataformas de falsas inversiones en criptomonedas, los investigadores comprobaron que
hacían un uso agresivo de estrategias de marketing en internet, utilizando incluso la
imagen de personajes conocidos afirmando que ha obtenido grandes beneficios con la inversión en criptomonedas en la plataforma.
Una vez captada la atención de las víctimas, comenzaban una segunda fase en la que
un supuesto bróker persuade a la víctima hasta ganarse su confianza y así conseguir que realice el mayor número de inversiones posibles bajo la promesa de una alta rentabilidad en poco tiempo.
Los estafadores
diseñaban páginas falsas donde la víctima puede acceder para consultar la presunta evolución de sus finanzas, siendo cifras inventadas por ellos.
Posteriormente, cuando la víctima deseaba recuperar su inversión, se perdía el contacto con el supuesto bróker, o bien, con diversas excusas intentaban conseguir más dinero de la víctima hasta que se percataba del fraude. Además, en la última fase del engaño, intentaban obtener más dinero de las víctimas ofreciendo los estafadores los servicios de un falso bufete de abogados bajo la promesa de ser capaces de recuperar todo lo invertido más los intereses generados.