La Guardia Civil investiga a una mujer de 61 años vecina de una pequeña localidad de la Costa de Granada como presunta autora de una estafa perpetrada a través de internet contra un hombre residente en Ubrique al que estafó presuntamente 4.930 euros mediante cargos fraudulentos en su tarjeta bancaria.
Tras la denuncia de la víctima, los agentes descubrieron que parte del dinero estafado con su tarjeta (más de 3.300 euros) había acabado en una cuenta bancaria de la provincia de Granada y desde ahí había sido transferido al extranjero, informa la Guardia Civil.
Los investigadores de Cádiz contactaron con los de Motril, quienes investigaron a la titular de la cuenta, que resultó ser una mujer de nacionalidad colombiana, vecina de una pequeña localidad de la Costa de Granada y sin antecedentes policiales.
Según la Guardia Civil, esta modalidad de estafa se conoce como "carding", y consiste en que los ciberestafadores usan la tecnología como herramienta para robar los datos de las tarjetas bancarias de sus víctimas con las que compran artículos.
Para asegurarse de que los datos de las tarjetas que han obtenido son válidos, los estafadores suelen realizar primero compras de importes pequeños que pasan desapercibidos y, si tienen éxito, realizan compras de mayor valor con el objetivo de determinar el saldo disponible en la tarjeta.