La mejor manera de acercar posturas siempre es debatir, contrastar las opciones diferentes, pero no se debe confundir debate con confrontación
Huelva necesita que sus bondades estén siempre pregonadas, expuestas, dadas a conocer, con el objetivo de que el turismo se consolide como una alternativa económica de generación de empleo, riqueza y prosperidad social. Pero lo necesita siempre desde una perspectiva positiva, que ponga en valor lo bueno, y no exteriorice lo negativo, que ha de intentar resolverse siempre de la manera más discreta posible y desde luego, sin aspavientos, yendo a bloque, sin declaraciones altisonantes que pongan en duda las posibilidades turísticas de nuestro territorio. No obstante, en el turismo, a diferencia de lo que piensan algunos, cabe el debate político, como cabe en todos los ámbitos, porque debatir, contrastar, opinar, en la búsqueda de un objetivo común, siempre es sano y hace avanzar. A lo mejor no hay que llegar al extremo de quienes dicen que en el conflicto está la base del desarrollo, pero desde luego, si hay que exponer posturas para llegar a consensos que hagan avanzar la industria turística, y den al sector toda la relevancia que requiere, sobre todo, trabajando juntos en la consecución de la desestacionalización de nuestra oferta, el gran mal presente. Por eso, no hay que confundir a la ciudadanía, y hay que dejar claro que si que cabe el debate, que aúne posturas y lleve a buen puerto, pero no la confrontación, que es lo que parece que practican tantas veces quienes piden precisamente menos debate.