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Huelva

Trabajan en la recuperación de una variedad autóctona tinta del Condado de Huelva

Se trata de una variedad "muy bonita" de la que se han identificado unas 300 cepas aisladas

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'Moraina o moraima' es el nombre de una variedad de uva tinta, autóctona del Condado de Huelva, que con más de 300 años de antigüedad ahora el Consejo Regulador de la Denominación de Origen trabaja por recuperar para sumar singularidad a sus vinos tintos.

En rueda de prensa, el presidente del Consejo Regulador de las Denominaciones de Origen Condado de Huelva, Vinagre del Condado de Huelva y Vino Naranja del Condado de Huelva, Manuel Infante, ha precisado que se trata de una variedad "muy bonita" de la que se han identificado unas 300 cepas aisladas.

Esto significa que no cuentan con patrón alguno, lo que constata que "resistieron a la filoxera, la plaga que a finales del siglo XIX destruyó en toda Europa y España las plantaciones de vides".

A la espera de que la Universidad Autónoma de Madrid date con exactitud la antigüedad de esta variedad de uva, Infante ha precisado que puede tener más de 300 años y que "existen pocas referencias sobre la misma".

En este sentido, ha señalado que hay un estudio del profesor Antonio Roldán de 1964 en que nombra esa variedad pero "es la única referencia y la hemos encontrado".

Infante ha explicado que la intención del Consejo Regulador es, en el marco de la Cátedra del Vino en la que participa junto con la Diputación de Huelva y la Onubense, "recuperar el material vegetal de la variedad al objeto de poder investigar con ella y ver sus posibilidades de vinificación".

Para ello ya se han iniciado los contactos con el departamento de Agroforestales de la Universidad de Huelva al objeto de comenzar a obtener y reproducir ese vegetal mediante técnicas de laboratorio que permitan hacer plantaciones de campo para ver cómo evoluciona la variedad.

Se trata, ha explicado Infante de un proceso de investigación largo, que podría concluir en cinco o seis años, ya que una vez constatada como se comporta la variedad hay que desarrollar microvinificaciones para ver "cómo se soporta en vino".

En su opinión, para la Denominación de Origen sería "la joya" el poder "presumir de una variedad tinta autóctona para producir tintos que ya destacan por su calidad" y que vendría a sumarse a las blancas como la zalema que constituye, actualmente, el grueso de la producción vitivinícola del Condado de Huelva.

 

 

 

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