Ecologistas en Acción considera que 2021 debe ser el año en el que comience la restauración hídrica de las marismas del Guadalquivir y se ayude a paliar el principal problema histórico de Doñana, el agua y la gestión de los recursos hídricos.

En declaraciones a Efe, el portavoz de Ecologistas en Acción en el Consejo de Participación de Doñana, Juan Romero, ha indicado que tras el año 2020 "la situación de las marismas es completamente lamentable, se encuentran prácticamente secas".

Ha recordado que las marismas del Guadalquivir "contaban originariamente con una superficie de unas 150.000 hectáreas y ahora solo quedan unas 30.000 como consecuencia de las transformaciones y sus procesos de desecación para regadío".

De ellas, ha añadido, "inundables quedan unas 17.000, que son las que están dentro del Espacio Natural de Doñana y dependen de la lluvia, que cada vez es más escasa y por eso las marismas están secas".

Romero considera que el reto del futuro, que debería comenzar este 2021, es "la restauración hídrica de las Marismas del Guadalquivir, de todas, las del este y las del oeste, y de todas las cuencas vertientes, principalmente, la recuperación del Caño del Guadiamar, que es la ficha 5 del proyecto Doñana 2005, fue declarado de interés general por el Estado y que no está ejecutada".

A ello suma "la necesaria recuperación del Brazo de la Torre, la ficha 7 del mismo plan, que tampoco está ejecutada y que se encuentra en un estado de total usurpación", con aproximadamente 19 kilómetros de longitud y 12 de anchura que "han desaparecido".

Esta restauración debe de venir acompañada, ha añadido, de "la recuperación de estuario del Guadalquivir, de la desembocadura y todas sus llanuras de inundación".

También reclama "evitar la ejecución de proyectos como los que se están impulsando en Trebujena (Cádiz), donde se pretenden urbanizar dos millones de metros cuadrados, con campos de golf y otras instalaciones destinadas al turismo de alto nivel".