La climatología ha sido la gran aliada de la Feria de San Lucas 2013, que ayer se despidió de una edición marcada por las ganas de disfrutar de jienenses y visitantes, que han distribuido su tiempo y su dinero entre los dos fines de semana y cada uno de los nueve días en los que se ha prolongado.
Desde el 12 de octubre y hasta ayer por la noche, tanto el recinto ferial 'Alcalde Alfonso Sánchez Herrera' como el centro de la ciudad con su Feria de Día, se han llenado de ciudadanos ávidos de disfrutar de nueve días en los que las temperaturas han alcanzado máximas de casi treinta grados y en los que se ha invitado a disfrutar del ambiente de casetas y bares.
El secretario de la Asociación de Caseteros de Jaén, Gabriel Soria, asegura que la actividad en las casetas ha descendido esta Feria en torno a un 30% respecto a la del año pasado. Confirma que han sido “menos las comidas de empresa, las reuniones familiares y de amigos que se han atendido en los almuerzos”, que otros años han hecho esperar a los jienenses para tomar asiento en las casetas.
Gabriel Soria señala a la Feria de Día como la consecuencia del descenso de clientes en las casetas del recinto ferial, que salvo los fines de semana, no ha funcionado como se esperaba. “Desde la Asociación seguimos pensando que son demasiadas casetas para una capital como Jaén. Con la Feria de Día hemos notado que el ferial se llenaba a partir de las cinco y media de la tarde, por lo que se come en los bares del centro y se disfruta de las casetas por la tarde, siendo perjudicadas las casetas de comida y las mixtas”, valora Gabriel Soria.
Por todo ello, asegura que las casetas que mejor han funcionado han sido las de copas, que no se han visto perjudicadas por la habilitación del botellódromo por segundo año consecutivo, ya que el perfil del cliente no es el de los jóvenes que hacen botellón los días de feria.
En esta línea, desde la Asociación de Feriantes han valorado la seguridad del recinto ferial por la independencia de éste con el botellódromo.
El edil de Mantenimiento Urbano, Manuel del Moral, ha destacado la limpieza del ferial, que ha sido “un éxito total” y ha asegurado que a ello ha contribuido la diferenciación de una zona para realizar el botellón. Este año se han recogido casi tres mil kilos de basura más que en 2012, habiendo llegado a los 77.000 kilos de desperdicios.
Los feriantes han hecho este año un esfuerzo y han permitido la celebración de dos días del niño, por lo que las atracciones han funcionado al precio de 1,5 euros el viaje los días 16 y 20, habiéndose animado el ritmo de personas que han disfrutado de ellas. Pero no sólo se aprovecharon los más pequeños de la casa, sino que el precio permitía el disfrute de cualquier ciudadano, por lo que el bolsillo de jóvenes y adultos lo ha agradecido.
Coinciden en que ha habido muchas personas en el recinto ferial, pero que no se ha traducido en un aumento del consumo en casetas, en las atracciones, tómbolas y los puestos de comida. “Habrá casetas que tendrán que poner dinero y otras que hayan salido mejor, pero se esperaba una feria más buena”, afirma Soria.
Abrir una caseta en el recinto ferial cuesta entre 5.000 y 18.000 euros, por lo que la inversión es importante y la recompensa a nueve días de trabajo es que la facturación permita cubrir gastos. En los próximos días los responsables de las casetas harán balance y cálculos de los gastos y facturación, para valorar el funcionamiento de la Feria. Desde la Asociación de Caseteros defiende la atención y calidad en el servicio que se dan en las casetas del ferial, que este año se han visto reducidas a 55, ocupando 79 módulos. “Habrá que reinventarse y plantear soluciones al Ayuntamiento porque cuesta mucho abrir una caseta”, confirma el secretario.
Ante la competencia entre las casetas, los puestos de comida rápida y los bares del centro de la capital, la premisa fundamental de todos los hosteleros ha sido mantener precios populares que animen al consumo. De hecho, una ración de pescado frito o de carnes costaba prácticamente lo mismo en el recinto ferial que en el centro de la ciudad.
Los días laborables la actividad en el recinto ferial ha comenzado prácticamente al atardecer, asegura Soria, mientras que en el centro de la capital los bares se han llenado al mediodía y durante la noche.
El presidente de la Asociación de Bares, Restaurantes y Cafeterías de Jaén 'Asostel', Gabriel Archilla, asegura que la Feria de Día “no ha estado mal”, reconociendo que el primer fin de semana funcionó mejor que este último. “La alegría del primer fin de semana a la hora de consumir no se ha notado igual estos últimos dos días, pero la festividad de San Lucas se notó y funcionó muy bien. Aunque el sábado disminuyó, no nos podemos quejar”, valora Archilla.
Defiende la Feria de Día como una de las tradiciones que diferencian a la de Jaén del resto de ferias y se muestra “contento” por el comportamiento en bares y restaurantes durante los nueve días Feria de San Lucas. “Tenemos que estar contentos porque la climatología ha acompañado”, asegura.
Además, las terrazas se han llenado prácticamente todos los días y hosteleros que el resto del año no pueden sacarlas han podido atender a sus clientes al aire libre y han visto compensado su esfuerzo con la ocupación y el servicio que se ha prestado estos días de Feria.
Al buen funcionamiento de la hostelería en el centro de la ciudad ha contribuido la programación cultural para la Feria de San Lucas, con teatro para niños y mayores, con estreno de musicales y los tradicionales talleres de La Paca para los más pequeños; o conciertos como la del 19 de octubre con Sandra Arco y Rafa Garcel en el Auditorio de La Alameda, al que asistieron más de mil personas solidarias con la causa: recaudar dinero para ayudar a Pablo Segovia, un niño con parálisis cerebral.
Todos los eventos han invitado a disfrutar del centro de la ciudad por la ubicación de los espacios culturales en los que se celebra. Mientras, en el recinto ferial quedan atracciones, el circo, la ludoteca para los más pequeños y las actuaciones musicales y de humor de la Caseta 'Jaén Arena'.
La edil de festejos, Cristina Nestares, ha valorado la celebración de la Feria de San Lucas destacando la importancia de que la climatología haya sido “estupenda”. Igualmente, señala que no se han producido incidencias importantes y que ha sido “una de las ferias más seguras de los últimos años”. En cuanto a las actividades culturales programadas, Nestares agradece la participación de los jienenses, que han llenado los eventos. “La gente se lo ha pasado bien y han funcionado casetas y bares del centro. La gente se ha mostrado muy contenta en esta Feria de San Lucas”, concluye Nestares.
A pesar de plantearse como la Feria más austera de los últimos 25 años, San Lucas dijo ayer adiós a centenares de jienenses con un espectáculo piromusical, recuperándolo tras años.
