Lo que es bueno para otras ciudades, para otras capitales de provincia no debe ser malo para Jaén. Lo que no destruyó el comercio tradicional en otras ciudades no tiene porqué destruirlo en esta, a pesar de su, muchas veces, visión catastrofista. El centro comercial del grupo Alvores, Jaén Plaza, que se ubicará frente a la Universidad de Jaén tiene ya fecha de inicio: 2016. Firmas de reconocido prestigio, las misma que frecuentan los vecinos en Granada, Málaga o Sevilla estarán en Jaén y más de veinte años después la capital tendrá una nueva gran superficie que, además, generará empleo. Es el momento, a dos años vista, de medir también la repercusión que tendrá en el resto del sector comercial de la ciudad en lugar de vocear mensajes agoreros. Y una vez definida, paliar la repercusión negativa si la hubiere. Ahí la federación de comercio y la misma Cámara de Comercio tendrán mucho que decir, de la mano claro está del compromiso (contante y sonante) de las administraciones. La apertura de este necesario centro comercial debe convertirse en una oportunidad para regenerar el comercio tradicional. Este Jaén Plaza que ahora se anuncia servirá también, sin duda, de acicate al otro centro comercial, que casi con toda seguridad querrá competir con la nueva oferta. No vendrá mal por tanto un poco de competencia para todos y sobre todo, no viene mal aquí lo que otros tienen allá.