Después de que el pasado verano se inaugurara la rehabilitación del patio de armas del Castillo ahora le toca el tuno a la Casa Palacio del mismo. Será mañana, aunque sin el acto oficial que estaba previsto. El edificio rehabilitado es una zona, dividida en dos plantas, con 300 metros cuadrados de superficie y que estuvo habitada hasta los años ochenta por la familia Calabrús, pasando entonces a manos municipales.
Las obras comenzaron el 6 de octubre, con un presupuesto de 135.000 euros, con cargo al Plan Provincial de Cooperación de Obras y Servicios del 2014, de la Diputación Provincial y fueron llevadas a cabo por la empresa tosiriana CMS Innova que ya realizó la rehabilitación del patio. Han consistido en la instalación de la solería, el saneado de las paredes, y la instalación eléctrica y de saneamientos.
Finalmente no habrá intervenciones oficiales debido a los tres días de luto oficial por el accidente de aviación en los Alpes franceses en el que han fallecido más de 45 españoles. Simplemente se abrirán las puertas del edificio para poder visitar la muestra permanente de maquetas de edificios del pueblo “Conócenos a vista de pájaro” realizadas por Manuel Molina Blanca.
Además del patio del castillo, durante el pasado año se arregló uno de los paños de las murallas del castillo más dañados, a través de una ayuda gestionada a través de Prodecan de unos 70.000 euros procedentes de los Fondos Europeos de Desarrollo y el Ayuntamiento invirtió otros 17.000 euros para la rehabilitación del torreón.
BIC
El edificio de la Casa Palacio, que se ha arreglado, es del siglo XVI y junto a un Alfarje policromado Mudéjar (un techo de madera) fueron declarados Bien de Interés Cultural en 1949. El origen del castillo es anterior, de época Almohade, conservándose algunos lienzos de fortificación. Tras la cesión de la comarca a la Orden de Calatrava, fue ampliamente reformado y ampliado. La Casa, de 300 metros cuadrados y tres plantas, estuvo habitada hasta los años ochenta por la familia Calabrús.
