Real Jaén CF:: De la Calzada, Javilillo (Jorge Vela, 75´) , Álvaro Ocaña, Sebas, Branco, Juanma Espinosa, Migue Montes (Sosa, 72´), Juanca, Pato (Chumilla, 85´), Gabri y Dani Perejón Atlético
Mancha Real: Álvaro, Juanlu, Rafa Navarro, Garrido, Juanfran, Albertillo (David Romero, 46´), Álvaro García (Benji, 46´), José Enrique, Salva (Nico, 81´), Nando y Carlos Jiménez.
GOLES: 1-0 (23’): Pato (penalti). 2-0 (42’): Perejón. 2-1 (66’): Juanfrán.
ÁRBITRO: Guillermo Paradas (Colegio andaluz). Tarjetas amarillas a Branco; Salva, Navarro, Pedro Bolaños. Roja a Carlos Jiménez (30´)
CAMPO: La Victoria. 1.200 espectadores. Con motivo del Día Internacional de la Mujer, entrada gratuita para todas las mujeres.
El El Real Jaén sumó su quinta victoria consecutiva tras superar en el derbi al Mancha Real en un partido que encarriló en la primera parte con dos goles y con la superioridad numérica por la expulsión del visitante Jiménez. Con todo, el Mancha Real no se rindió y plantó cara en el segundo tiempo acortando distancias hasta que Juanca sentenció para que el Real Jaén sume tres nuevos puntos que le afianzan en la zona de promoción de ascenso. El equipo de Jaime Pérez quería brindar un buen partido a su afición ante un rival en estado de gracia, pues no obstante, el Mancha Real de Pedro Bolaños llevaba nueve partidos sin conocer la derrota. El partido comenzó con respeto por parte de ambos equipos de forma que en los primeros minutos apenas hubo más que tanteo y declaraciones de intenciones, muy mediatizadas por el miedo a perder el balón. Aunque salió más intenso el Mancha Real, cómodo desde los primeros minutos para intentar imponer el ritmo que más le convenía ante un Real Jaén que no encontraba soluciones. Fue del Mancha Real la primera llegada tras un saque de esquina que salvó la defensa local. Los verdes dominaban ante la inoperancia de los de Jaime Pérez, que se mostraban espesos y con pocas ideas. Un disparo blando de Espinosa fue la primera ocasión para los blancos, que seguían sin tener la posesión. Sin embargo y en una acción aislada, un derribo a Javilillo dentro del área por parte de Juanfran fue sancionado con penalti que transformaría Pato. De esa manera, se ponía por delante el Real Jaén sin haber hecho demasiados méritos. Apenas unos minutos después, el colegiado volvió a señalar un penalti a favor de los blancos por derribo a Migue Montes, pero esta vez la pena máxima, ejecutada por el propio Montes, se estrelló en el poste. No hubo gol pero el Real Jaén obtuvo beneficio de la jugada al ser expulsado Carlos Jiménez, que primero recibió amarilla y después la roja, de tal forma que el Mancha Real se quedaba con diez jugadores con mucho partido aún por delante. Se intentó reponer el Mancha Real pese a su inferioridad y a base de orgullo y coraje llegó al área del Real Jaén aunque sin remate. Los de Pérez, por su parte, buscaban el segundo aprovechando su superioridad y lo hicieron subir al marcador a dos minutos del descanso con una gran definición de Perejón, logrando por tanto el Real Jaén encauzar el partido poco antes de llegarse al descanso.
Segunda parte
Tras la reanudación, el Mancha Real movió el banquillo, hizo ingresar a David Romero y Benji y con ese mensaje quiso expresar que no se rendía. Y así en los primeros minutos los visitantes crearon algún problema en jugadas de estrategia a la vez que el Real Jaén buscaba el tercero para sentenciar el partido. El Mancha Real lo seguía intentando desde su inferioridad y David Romero estuvo a punto de acortar distancias, preludio de lo que sería el 2-1 obra de Juanfran tras un fallo de la defensa del Real Jaén. Se metía en el partido el Mancha Real aún con muchos minutos por delante y el tanto estimuló a un Jaén que se volcó en el área de Álvaro. Entraron Sosa y Jorge Vela en el equipo local para buscar más frescura en el ataque pero fue David Romero el que estuvo a punto de lograr el gol del empate. Sin embargo, sería Juanca el que acertaría a llevar el balón a las redes y el que sentenciaba el partido con un disparo raso. Ya no quedaba tiempo para el Mancha Real, que había vendido cara su derrota pese a jugar en inferioridad durante sesenta minutos. Fue un buen rival.