El marchador español, sin embargo, no podrá competir, siguiendo la normativa del COI, en los Juegos Olímpicos de Londres, con 35 años, después de haber sido tres veces subcampeón del mundo y una vez subcampeón olímpico, siempre en la distancia de 20 kilómetros.
Las nuevas reglas antidopaje del COI le impedirán competir en dichos Juegos puesto que ha recibido una sanción superior a seis meses por violación de la normativa antidopaje.
La IAAF basa la sanción a Paquillo en la regla 32.2 (f) de su reglamentación antidopaje, que contempla la misma suspensión de dos años para los que dan positivo y los que están en posesión de productos prohibidos.
Investigado en la operación Grial, Paquillo confesó en febrero pasado haber tenido productos dopantes en su domicilio granadino pero aspiraba a que dicha confesión le sirviera para obtener de la IAAF una rebaja de la sanción.
“Un atleta sólo puede aspirar a una reducción de la sanción si ha proporcionado una ayuda sustancial para descubrir o establecer una violación del reglamento antidopaje por parte de un tercero, explicó no obstante la IAFF a posteriori.