Carlos Fernández lleva casi cuarenta años vinculado profesionalmente al sector de la mutua de accidentes de trabajo. Hasta la aparición de Podemos no había militado en partidos políticos, aunque su compromiso social siempre estuvo presente, desde que participó en el movimiento estudiantil cuando era alumno del Instituto Coloma. “Eran unos tiempos colvulsos y apasionantes, recién muerto el dictador genocida, y estábamos implicados en la lucha democrática”. Pero, sobre todo, hay una fecha que le marca profundamente, la del 4 de diciembre de 1977, “porque me hace ser consciente de la situación subordinada que tiene Andalucía. Desde aquella fecha se me instaló el sentir andalucista”. Recuerda que, por entonces, su madre le decía “deja el mundo correr”, aunque, como él mismo admite, “ya era tarde”. No obstante, su trayectoria profesional le hizo alejarse de la primera línea hasta que se “reengancha” con el 15M. “Es cierto que no soy activista en las plazas, pero sí tomo conciencia nuevamente de la realidad política del país. Ahí doy un paso por el activismo social” y empieza a militar en Podemos, antes de seguir cierto curso natural de la mano de Teresa Rodríguez con Adelante Andalucía, formación con la que se presenta como candidato a la Alcaldía en Jerez.
¿Por qué el paso de Podemos a Adelante?
–Hay que recordar que Podemos Andalucía siempre se diferenció de Podemos nacional reivindicando tener voz propia, y tener nuestra propia soberanía. Esto no fue posible. Algunos de los que habíamos estado en el origen de Podemos Andalucía decidimos que teníamos que tirar a través de Adelante Andalucía, porque Andalucía necesitaba tener una voz propia sin tutelas de Madrid, y creo que es el único partido en el que puedo llevar a cabo ahora mismo mis ideales y mi pensamiento de justicia social y de equidad.
No han participado en el proceso de confluencias de fuerzas de izquierda en Jerez. ¿Por qué?
–Nosotros respetamos los procesos de otras fuerzas de izquierdas. Desconocemos cómo han sido. No nos ha llamado nadie, pero ya dijimos que no éramos una fuerza que renunciara a nuestros postulados por entrar en gobiernos con el PSOE. No nos vemos gobernando con un partido que no ha hecho viviendas públicas, que ha asfaltado los parques, que no ha cuidado el arbolado, que no ha tenido actuaciones de plan de movilidad, que no ha apostado por el cambio en la red urbana de autobuses... Las políticas del PSOE son muy parecidas a las que pudo hacer Pelayo con el PP en su momento, salvo por unas leves diferencias. No solo eso, el actual gobierno entró diciendo que iba a recuperar a las personas expulsadas por el ERE de Pelayo, y que el suministro de agua en las ELA iba a revisarse a través de una auditoría para que no lo asumiera a Aqualia... No se ha hecho nada. Para nosotros no son de fiar.
El renunciar a confluir, ¿no es darle ventaja a la derecha?
–Lo que tenemos claro es que el 28M habrá una papeleta andalucista, que va a recoger el sentir de gente que no está dispuesta o no ve con buenos ojos que se renuncien a sus propuestas por entrar en un gobierno. Fuimos la primera fuerza de izquierdas más votada en Jerez en las autonómicas. Nosotros no hemos venido a fragmentar la izquierda. Presentamos la papeleta verdiblanca, con líneas rojas, que son las de redistribución de la riqueza, las verdes de la ecología y las moradas del feminismo, y no renunciamos a esas propuestas para entrar en un gobierno que aplique las mismas políticas, con diferencias, de la derecha.
No le culpo de fragmentar, pero sí le hago ver que ese escenario fragmentado a la izquierda a quien beneficia es a la derecha
–Beneficiará a quien tenga que beneficiar. Nosotros tenemos que estar ahí porque hay gente que quiere que estemos ahí, como demostramos en las pasadas autonómicas. Fuimos los más votados a la izquierda.
Lograron más de 7.300 votos, el cuarto partido más votado, y el segundo de la izquierda, por detrás del PSOE.
–Según lo que consideres de izquierdas. Para nosotros fuimos los primeros de izquierdas.
¿Confían en que se pueda repetir ese resultado?
–Salimos con mucha fuerza para aumentarlos. Se dan las circunstancias para que así sea. Creo que estamos demostrando cosas que no están demostrando otras fuerzas que vienen del 15M. No somos políticos profesionales y creo que eso la gente lo premia.
Y, llegado el caso, ¿cuáles son sus líneas rojas?
–Nosotros nunca vamos a propiciar gobiernos de derechas, lo tenemos muy claro, pero tampoco seremos cómplices de entrar en gobiernos que mantienen políticas muy parecidas a las de la derecha.
En su presentación, Teresa Rodríguez dijo que usted sabe qué es lo que pasa en Jerez. ¿Qué pasa en Jerez?
–Creo que hay un problema estructural de muchos años de gobernanza tanto del PP como del PSOE, que ha provocado que Jerez sea de las poblaciones que tengan ahora mismo más barrios empobrecidos, con una tasa de desempleo del 26%, donde hay muchas familias a las que les cuesta mucho esfuerzo llegar a fin de mes, o que no saben dónde van a poder seguir viviendo o qué vivienda poder adquirir. Una ciudad que tuvo además un desarrollo urbanístico horroroso en los últimos años de Pacheco, que ha hecho que Jerez sea una ciudad insostenible, y hay que darle un vuelco a ese modelo de ciudad, sobre todo desde el punto de vista urbanístico, para contar con una ciudad sostenible y accesible. Y del mismo modo aprovechar para crear empleo desde lo público, ya que se nos quiere hacer ver que todo tiene que venir de lo privado, y tenemos la oportunidad desde lo público de dar ese paso valiente. Hay que desnormalizar que haya personas que no pueden pagar sus facturas de luz, que hay personas que no tienen vivienda pública, y jóvenes que no la tengan, y que muchas personas sigan sin trabajo.
Eso es la teoría, pero en la práctica ¿por dónde pasan las líneas básicas de su programa electoral?
–Nuestra principal línea de trabajo pasa por un plan de empleo público, ya que hay una oportunidad de crear ahora empleo público de la mano de la transición ecológica, desde la creación de una empresa de energía municipal, y eso da muchas oportunidades, tanto para la instalación como para el mantenimiento, incluso pensamos que si efectivamente que están alicatando el campo de fotovoltaicas, tenemos oportunidad grande de fabricar esas placas. Incluso un plan de bioclimatización, que vendría con esa empresa pública, en colegios, edificios públicos... Eso iría enlazado con el plan de reindustrialización, con un plan de ampliación del parque público de vivienda, ya que desde que llegó Mamen Sánchez no se ha puesto ni un ladrillo, y Pelayo lo que hizo fue entregar las que se habían hecho antes. Una nueva red de autobuses urbanos, ya que no son nada prácticas. También proponemos un programa de economía circular agraria, de soberanía alimenticia; un plan de regeneración urbana que va relacionado con el plan de actuación climática, cuidando el arbolado, las fuentes... pensando siempre en las personas más vulnerables. También contemplamos un plan de ordenación territorial, ya que estamos viendo las facilidades que se le están dando a todos los parques fotovoltaicos que se están instalando.
Ha hablado de barrios de primera y de tercera en Jerez, ¿cómo piensan hacer que los de tercera sean de primera también?
–No puede ser que los centros históricos estén siempre limpios, que tienen que estarlo, y que los de la periferia, desde La Granja, el polígono, la zona sur... no les limpien las calles. Tenemos que hacer un plan para que esos barrios reciban los mismos tipos de servicios que el resto de barrios.
¿Por dónde creen que debe pasar el futuro de la ciudad en materia turística?
–Hay dos cosas. Tanto Mamen Sánchez como Pelayo parece que lo quieren es copiar los modelos de ciudades como Sevilla y Málaga, y cuando se llegue no va a haber solución. Las medidas que hay que llevar a cabo en materia turística en Jerez han de ser sociales y ambientales, para que hagan de la ciudad un destino turístico responsable. Eso pasa por contar con un plan que regule la vivienda turística, pero que regule también cuántas plazas hoteleras puede tener Jerez. El Ayuntamiento tiene que crear viviendas en régimen de alquiler que le dé vida al centro, porque eso genera economía local y circular. Incluso un plan de climatización para tener una ciudad en la que se pueda pasear bajo temperaturas horrorosas.
¿Qué le parece la medida de expropiación de fincas ruinosas en el centro?
–Las medidas de expropiación no son malas, lo que no se puede hacer es vender esas fincas para promotoras que lo que van a hacer son pisos turísticos, ya que le están quitando la vida al centro y se va a un modelo insostenible dentro de la ciudad. La medida puede ser buena, pero hacia donde nos lleva la medida es malo
¿Qué marca la diferencia entre Adelante Andalucía y el resto de formaciones de izquierdas?
–Lo primero que nosotros tenemos son tres colores que son los que identifican nuestros ideales. El rojo para la lucha de la clase obrera anticapitalista, el verde ecologista y el morado feminista. Añadimos la verde y blanca del andalucismo para reivindicar nuestra soberanía. Nosotros no tenemos tutelas con ningún partido de Madrid. Eso es muy importante. No tenemos que renunciar a nuestras propuestas y políticas por unos pactos de legislatura ni de gobernanza. Es importante presentar un programa y saber que no renunciamos a ese programa, frente a los que presentan un programa y que por circunstancias de gobernanza renuncias a ellos. Hay una diferencia importante en lo que es la representación de nuestro andalucismo y estrategia política.
