La Hermandad del Cristo de la Expiración ha anunciado públicamente la suspensión de la misa de los sábados “hasta nuevo aviso”, lo que implica que la ermita de San Telmo se queda a partir de ahora privada de la celebración de la eucaristía, una suerte que ya corrió hace años la vecina capilla de la Yedra, que igualmente pertenece a la parroquia de Madre de Dios.
La corporación del Viernes Santo no ha ofrecido mayores explicaciones acerca de los motivos que justifican el cese ‘sine die’ de la celebración de la eucaristía, si bien todo apunta a la falta de sacerdote.
En San Telmo se ofrecían hasta el curso pasado dos misas semanales, el sábado y el domingo. Antes del verano ya se suprimió la eucaristía del domingo (13.00 horas) y ahora se adopta idéntica decisión con la del sábado.
Desde que en 2014 los jesuitas se marcharan de Madre de Dios las dificultades para garantizar el culto en los templos de esta feligresía han ido en aumento, lo que ha afectado de manera singular primero a la Hermandad de la Yedra y ahora a la del Cristo de la Expiración.
A día de hoy en ninguno de estos dos templos se celebran misas semanales, viéndose privadas ambas corporaciones del sacramento de la eucaristía, que teóricamente tendría que ser pilar básico de su actividad ordinaria.
Eso sí, en el comunicado público de la Hermandad de la Expiración se recuerda que quienes quieran cumplir con el precepto semanal pueden hacerlo en la parroquia de Madre de Dios, los sábados a las 20.00 horas y los domingos a las 12.30 horas.
Y todo ello, curiosamente, coincidiendo con el que dicen es el mejor momento histórico del Seminario Diocesano.