La Comisión Local de Patrimonio Histórico ha dado luz verde esta semana a cuatro proyectos municipales que se ejecutarán en el centro histórico, tres de los cuales, serán subvencionadas por la Diputación Provincial de Cádiz. A las intervenciones ya avanzadas por el Gobierno en Palacio Riquelme y las calles Barranco y Doctor Lillo, se suman las previstas en el templete de Alameda Vieja y la que se destinará a rehabilitar zonas de cubiertas en el Palacio de Villapanés. Todas ellas se llevarán a Junta de Gobierno Local para su aprobación, al objeto de ser licitadas en breves fechas.

Estas actuaciones enmarcan en el objetivo del Gobierno de impulsar la conservación del patrimonio municipal para frenar el deterioro que sufren edificios históricos o emblemáticos de la ciudad,  según ha señalado el teniente de alcaldesa de Presidencia y del Centro Histórico, Agustín Muñoz.

Es el caso de la restauración integral del templete de la Alameda Vieja, que cuenta con una subvención de 56.530 euros, y que va dirigida a  recuperar su estado original y frenar el proceso de deterioro en que se encuentra debido al uso, la falta de mantenimiento, actos vandálicos, y otras acciones que ha sufrido con el paso del tiempo.

Entre las actuaciones proyectadas figuran labores de limpieza y reposición de materiales en podio y escalinatas; eliminación y reposición de la piezas de azulejos; adecentamiento de la solería; reposición de adornos de acero; desmontaje de elementos deteriorados y reposición de maderas en el techo; dotación de puntos de toma eléctrica para focos; limpieza del sistema de canales y bajantes; y tratamientos anti corrosión de elementos decorativos y pintado de estructuras de acero, entre otras.

Respecto al Palacio de Villapanés, la propuesta elaborada se centra en la reforma de las cubiertas, dando así solución a una serie de patologías detectadas en el inmueble, entre las que figuran problemas generales de estanqueidad de la cubierta; falta de aislamiento de la misma, o el mal estado y escaso mantenimiento de algunos elementos del edificio.

En consecuencia, esta intervención, que se centrará en una superficie de cubierta de unos 110 metros cuadrados, incluirá una serie de  trabajos previos preparatorios, tras los cuales, se llevarán a cabo las correspondientes obras de montaje de andamiaje y acopio de material para proceder al tabicado de huecos en ventanas; consolidación de forjados de la planta segunda; desmontaje de piezas y estructuras que se encuentren en mal estado; o el saneamiento completo de la madera, eliminando zonas afectadas por el paso del tiempo.

Igualmente, se aplicarán tratamientos para evitar la acción de termitas y carcoma y se procederá a la impermeabilización de la zona afectada, una vez consolidada la estructura.