El IES Lola Flores vuelve a movilizarse y pide colaboración para que su problemática llegue al mayor número de personas. No pueden más, la AMPA del instituto y los alumnos han denunciado la demora de dos años que acumula la construcción del nuevo aulario. Mientras tanto, el instituto ostenta el triste récord de ser, con cuatro módulos, “el centro con más aulas prefabricadas de Cádiz”, con los perjuicios que ello supone para el alumnado. “Tienen que dar clases en módulos en los que las temperaturas se vuelven extremas, tanto en invierno como en verano, y donde las paredes no aíslan bien ni del ruido ni del agua que, en no pocas ocasiones, se filtra e impide encender la calefacción con el enorme riesgo que supone”.
A estas circunstancias hay que sumar que el centro lleva una década sacrificando aulas específicas para ganar espacio con el detrimento que ello supone para la enseñanza en Secundaria. Así, además de haber perdido “el aula de Música, de Tecnología, el laboratorio, el taller de Química, el aula de Informática, así como las aulas de desdobles, la cocina cuenta con unas instalaciones de los años 60/70”, denuncian. Unas instalaciones en las que tienen que formarse el alumnado de Formación Profesional Básica (FPB) de Cocina y Restauración, de ciclo formativo de grado medio (CFGM) de Técnico en Cocina y Gastronomía y de Nuevo Grado Superior de Cocina, y estos últimos se ven obligados, dada la falta de espacio y adecuación de las instalaciones, a cursar el grado en horario de tarde”.
Mientras tanto, las familias denuncian que los políticos “parecen desoír nuestras continuas peticiones para iniciar las obras del nuevo aulario, cuya ubicación va exactamente en la zona que ocupan actualmente los cuatro incómodos módulos de prefabricadas, y, a noviembre de 2023, ni siquiera han sido trasladados para dar comienzo a la obra”.
Si bien la Consejería de Educación y Deporte de la Junta de Andalucía recogió y publicó en el año 2020 en su Plan de Infraestructuras la ampliación de los espacios educativos del IES Lola Flores y el 19 de noviembre de 2021 se hacía público el servicio de redacción de proyecto, que se había adjudicado al arquitecto Julio Rodríguez Moguer por un importe de 143.876,90 euros, hasta el momento sigue sin haber movimiento. Al contrario, denuncian que la Administración da la callada por respuesta. Por ello, la AMPA ha hecho un llamamiento a la comunidad educativa para que se movilicen “al no recibir ninguna respuesta satisfactoria por parte de la Administración".