“Recortar en sanidad mata. La calidad de vida disminuye si no se atienden las patologías de forma adecuada y hay cero implicación en el proceso terapéutico. Y si no se renuevan contratos no hay personal especializado en vínculos terapéuticos con la población”. Con este testimonio de Germán, profesional sanitario jubilado y doctor en Salud Mental, y la posterior lectura de un manifiesto se daba por concluida la concentración de la Coordinadora por la Sanidad Pública de la provincia de Cádiz a las puertas del centro de salud de La Milagrosa. Una protesta que ha reunido a políticos de la izquierda, sindicatos, sanitarios y vecinos de las federaciones Solidaridad y La Plazoleta para defender la sanidad pública y denunciar la “privatización” de servicios.
La elección de este centro de salud no era al azar. “Este centro desatiende a muchísima población de Jerez por esa política de mala gestión de la sanidad pública de Juanma Bonilla”, ha advertido la diputada socialista Mamen Sánchez, que ha dejado claro que “con la salud no se puede jugar”. “La prioridad del presidente de la Junta tiene que ser arremangarse y empezar a solucionar el caos sanitario que tiene en Andalucía y en la ciudad de Jerez”. Una ciudad donde sus vecinos, según Sánchez, “tardan más de un mes” en ver a su médico y “más de un año” en operarse o ver a un especialista “cuando hay más dinero que nunca”.
En esta tónica, el secretario provincial del PSOE, Juan Carlos Ruiz Boix, ha criticado el “deterioro” de la sanidad pública de forma “intencionada” por parte de Moreno “para equipararla con la de la Comunidad de Madrid”, donde el 60% de la población tiene tarjeta sanitaria privada, que a nivel regional ha pasado en estos cinco años, en palabras de Ruiz Boix, “del 10 al 25%”. De la misma forma, ha reprochado a Moreno que su gestión sanitaria siga “favoreciendo” a las clínicas privadas, como está ocurriendo en esta provincia, inyectando “más de 700 millones de euros” al Hospital de Pascual en cinco años del Partido Popular y con un contrato también para los próximos cuatro años”.
En representación de los vecinos, el presidente de la Federación Solidaridad, Manuel Cazorla, ha denunciado los problemas para coger cita que arrastra el centro donde estaban escenificando la protesta. "Los vecinos se tienen que venir aquí temprano porque no hay cita”. Por esta razón, ha hecho un llamamiento a la población para que visualicen su malestar "con hojas de reclamaciones”.
“Desde Facua llamamos a los usuarios a la movilización, no podemos resignarnos, hay que hundir a los centros de salud en reclamaciones siguiendo nuestro derecho”, ha llegado a decir el scretario general de Facua, Jesús Yesa, tras alertar de las consecuencias de la “privatización” de la sanidad pública. En esta línea se expresaba desde Izquierda Unida su coordinador provincial, Jorge Rodríguez, que ha reclamado a la Junta un plan especial para reducir las listas de espera tras denunciar el “desmantelamiento” de la sanidad pública y el acceso libre de los ciudadanos. A nivel local, desde La Confluencia, Raúl Ruiz Berdejo, además, ha exigido a la alcaldesa, María José García-Pelayo, a que “deje de mirar para otro lado” y siga “empeñándose” en hablar de Cataluña. “En esta ciudad tenemos muchos problemas”.
Por su parte, la Consejería de Salud y Consumo de la Junta ha defendido que ha invertido desde 2019 un total de 125 millones de euros en la mejora de los centros de Atención Primaria y hospitales de la provincia de Cádiz, con un "esfuerzo inversor" que ha ido destinado a la reforma y renovación de las instalaciones, la adquisición de equipamiento tecnológico de última generación y la puesta en marcha de nuevos servicios "que han mejorado la calidad de vida de la ciudadanía", según resalta la delegada territorial en la provincia de Cádiz, Eva Pajares.
