El Centro de Conservación de la Biodiversidad Zoobotánico Jerez ha acogido un nuevo acto de apadrinamiento, y ya van cinco, dentro del 71 Aniversario dedicado especialmente a la figura de los padrinos de esta institución jerezana. El nuevo padrino que se integra en la familia del Zoobotánico es la empresa Promarketing, entidad destinada a la dirección, promoción y comercialización de empresas turísticas que apadrina a los linces ibéricos.
En el acto, el director del Servicio de Protección Animal, Juan Ceballos ha dado la bienvenida al nuevo padrino agradeciendo “su apuesta por nuestro centro, referente del turismo familiar y una de las instalaciones más visitadas de la provincia con más de 140.000 visitantes anuales presenciales y más de un millón virtuales”. También ha manifestado que a partir de ahora “una especie referente irá de la mano de una empresa conocedora de su potencial turístico y seguro que su apuesta hará que sigamos creciendo y construyendo un futuro mejor del Centro de Conservación de la Biodiversidad Zoobotánico Jerez”.
El responsable de Promarketing, José Yagüe ha destacado el potencial natural del Parque jerezano y ha puesto de manifiesto que su trabajo estará encaminado en impulsarlo y llevarlo a las zonas de afluencia turística. Esta empresa comenzó su andadura con el Zoobotánico en los años noventa y entonces apadrinó al canguro de Bennet, en esta ocasión ha vuelto apadrinando al lince ibérico.
La colaboración de Promarketing será poner en conocimiento de los visitantes los activos turísticos del Zoobotánico, a través de la distribución de folletos, su propia app, publicación en su revista y paneles con código QR, estos últimos distribuidos en más de doscientos puntos turísticos de la costa. “El objetivo es que donde haya un turista éste tenga conocimiento del Centro de Conservación de la Biodiversidad Zoobotánico en Jerez y vega a visitarlo”, ha comentado el responsable de Promarketing.
El acto, que ha contado con la presencia de alumnos de tercero y cuarto de Primaria del CEIP Luis Vives, ha finalizado con el descubrimiento de una placa conmemorativa de este apadrinamiento en la instalación de los linces ibéricos.