El Xerez DFC encara este sábado el
partido de ida de la segunda eliminatoria de los playoff de ascenso a Segunda Federación. El equipo de David Sánchez visita el Estadio Martínez Pirri de Ceuta
a partir de las 18.30 horas con la intención de sacar
un buen resultado para la vuelta de la siguiente semana en el Municipal de Chapín.
Será
un choque igualado entre dos equipos que han llegado al final de liga
en un gran estado de forma. Los azulinos eliminaron en la primera ronda al
Pozoblanco y el Ceuta B hizo lo propio con el
Ciudad de Lucena, endosándole
un 0-4 en su casa después del empate en tierras norteafricanas. Un resultado que es
un aviso a navegantes.
Un partido a
180 minutos en el que puede ocurrir de todo y del que los xerecistas no se fían. Ya David Sánchez anunciaba que el filial caballa es
el rival que nadie quería porque es un equipo que juega
sin la presión de tener que ascender. Además, la visita al Martínez Pirri no será tarea fácil. Habrá
entradas gratis para aficionados tanto locales como visitantes y a buen seguro se espera un gran ambiente.
El Ceuta B quiere aprovechar este primer choque en casa, con su gente y en un terreno de juego que no es especialmente cómodo y del que
muy pocos equipos han logrado sacar resultados positivos esta temporada. Uno de ellos, precisamente, el Xerez DFC, que
se llevó el triunfo en liga por 1-2. En el otro enfrentamiento que tuvieron, empate a uno en el Municipal de Chapín. Unos resultados que, en este escenario, darían la clasificación a los azulinos.
Para el choque, es el plantel de David Sánchez el que tiene el factor campo, pudiendo jugar la vuelta en casa, y la ventaja de la clasificación en la liga regular. En caso de que la eliminatoria acabara con empate al final de la prórroga, se clasificaría el Xerez DFC.
El entrenador xerecista podrá recuperar casi con total seguridad a
Javi Díez y a Teté, que tuvo que ser cambiado en el partido contra el Pozoblanco en Chapín. El que todavía es duda es
Carri, que no pudo salir al terreno de juego el pasado domingo y que todavía trabaja al margen de los compañeros.