El flamenco tradicional de ‘La herencia de los Carpio’ y la fusión de estilos sureños que propone La Mare en su propuesta titulada ‘Del fuego’ son los espectáculos que pasarán este fin de semana por el escenario de los Claustros de Santo Domingo.
El primero de ellos, bajo la dirección de El Berenjeno, forma parte del ciclo de los
Viernes Flamenco que este viernes 26 organiza la peña El Pescaero. El segundo, el de la cantautora gaditana, pondrá fin el sábado, 27 de julio, al
ciclo ‘En la Frontera’, que agrupa a aquellos artistas más eclécticos y abiertos a otras tendencias musicales.
En ‘La herencia de los Carpio’ el público podrá apreciar las cualidades cantaoras de una de las sagas más relevantes del flamenco de Jerez.
Sobre el escenario de los Claustros de Santo Domingo estarán, al cante, Antonio Carpio (Tío Aoño), Alfonso Carpio Mijita, Antonio Peña Carpio (El Tolo) y José Carpio (El Berenjeno).
Precisamente, sobre éste último recae la dirección artística y musical de una propuesta que
cuenta con la guitarra de Domingo Rubichi y las palmas de Ale de Gitanería y Alfonso Montoya Carpio. Al fin de fiesta se sumarán otros miembros de la familia.
El ciclo Viernes Flamenco, que comenzó el 12 de julio, continuará el 2 de agosto. En ese día, la Peña La Zúa liderará la propuesta que protagonizan Dolores Agujetas e Inés Bacán, al cante, y Carmen Ledesma, al baile. Una semana más tarde, la Peña Luis de la Pica pondrá fin a este ciclo con un recital a cargo del cantaor Luis El Zambo, además del baile de Aitana de los Reyes y Pastora Galván.
La Mare
De un estilo muy diferente es la propuesta musical de La Mare.
La compositora, música y cantante gaditana presentará este sábado 27 de julio en Los Claustros de Santo Domingo su último trabajo discográfico, que lleva por título ‘Del fuego’. Se trata de la primera parte de un proyecto más amplio que verá la luz próximamente.
En ‘Del fuego’, La Mare se presenta envuelta en un universo de sonidos nuevos, atmósferas electrónicas y efectos vocales sin perder un ápice de su esencia. El disco consta de seis canciones que abordan temas que abarcan desde el amor y la vulnerabilidad al humor más irónico.
Un trabajo que ha sido calificado como “maduro y elegante” y el que también se advierte que La Mare inicia un nuevo camino artístico hasta el punto de marcar un punto de inflexión en su trayectoria.
Amante de la palabra y las músicas de raíz,
la cantante gaditana se caracteriza por la fusión de ritmos y estilos y la dulzura no exenta de garra de su voz. En su música priman los ritmos del Sur del mundo, de forma que el público encuentra en La Mare los ritmos tradicionales del Norte al Sur de la península, con matices del folclore latinoamericano y toda su raíz africana.
A esta riqueza musical se suma toda una propuesta poética, siendo sus letras su sello de identidad. Frescura y profundidad en perfecta sintonía con un gran manejo del sentido del humor. La artista conduce sus conciertos con una gran soltura a través de un universo de emociones, haciendo sentir al público como parte esencial del espectáculo.