La primera fase de los trabajos de excavación en el Cenador de Carlos V, en el Real Alcázar de Sevilla, ha finalizado y con ella se descarta que sea la reconversión de una tumba funeraria.
Así lo han explicado el alcalde de Sevilla, José Luis Sanz; y el investigador responsable de la excavación, el profesor Miguel Ángel Tabales, en una visita técnica.
A lo largo de 20 días se han realizado dos sondeos, que han mostrado que el Cenador de Carlos V está retocando un edificio anterior, fechado en las últimas décadas del siglo XII y primeras del siglo XIII.
Estos trabajos avalan que el Cenador de Carlos V se asienta sobre los restos de un antiguo palacio almohade, con una dimensión mayor que la construcción renacentista.
Sito en las grandes huertas musulmanas del Real Alcázar, tuvo una función recreativa.
En estas primeras catas se han hallado restos de ventanucos que iluminaba el Cenador, que actualmente tiene una entrada al Sur.
Estos trabajos se van a aprovechar para seguir investigando. De hecho, no se descarta levantar una fuente del interior del edificio, para hallar las tumbas de los reyes musulmanes.
“El Cenador de Carlos V es la reforma de un edificio islámico, un palacio almohade, con dimensiones eran diferentes a las actuales. La zona de las huertas islámicas disponía de zonas de recreo y de vida pública perfectamente organizadas y planificadas. Se descarta la función funeraria de la que se venía hablando”, ha dicho José Luis Sanz
El profesor Miguel Ángel Tabales, asegura que las tumbas de los reyes musulmanes están en el Alcázar. “Aquí están las tumbas, seguro. Tenemos nuestras sospechas de dónde están”, ha reconocido. Sin embargo, la excavación ha permitido conocer “mejor” el alcázar islámico.
“Del Alcázar islámico se ha conocido bastante. Se ha hablado mucho de los jardines del siglo XVI y XVII en adelante, pero el mundo de la gran edificación califal almohade, que era su enorme alcázar de 17 hectáreas, quedaba huérfano cuando nos adentrábamos en sus huertas. No sabíamos nada de sus huertas y ahora empezamos a saber que estaban regularizadas y estaban destinadas a funciones de ocio”, ha reconocido Tabales.
El objetivo es que estén finalizados en el año 2026, cuando Sevilla conmemorará el 500 aniversario de la boda entre Carlos V e Isabel de Portugal.