El aeropuerto de Santiago ha gestionado este jueves una incidencia, cuando la presencia de dos perros sueltos en un área restringida ha obligado a retrasar unos minutos el aterrizaje de un vuelo procedente de Londres.
Según han informado a Europa Press fuentes de Aena, los hechos han tenido lugar sobre las 10,00 horas, cuando personal de handling que trabaja en el área de maniobras detectó la presencia de dos perros en esa zona.
Al tratarse de un área restringida, el aeropuerto activó entonces un procedimiento y el servicio de control de fauna del aeropuerto recogió a los perros y los sacó de la zona.
No obstante, para garantizar la seguridad de las operaciones, un vuelo de Ryanair procedente de Londres retrasó su aterrizaje hasta que los animales estuviesen fuera del recinto, con lo que tomó tierra con 10 minutos de retraso. Los técnicos trabajan ahora para averiguar cómo accedieron los perros a esta zona.