El Xerez CD encara este miércoles la primera la
primera eliminatoria de Copa del Rey. Un “
premio para lo que se consiguió el año pasado” como comenta
Diego Domínguez. El delantero xerecista entiende que “hay que disfrutarlo y que la gente sepa valorar dónde estábamos hace un año y dónde estamos ahora.
Estamos volviendo a ser lo que un día fue el Xerez”.
Reconoce que “intentaremos conseguir esa victoria para
seguir ilusionando a la afición. Si hay suerte, estaremos en ese sorteo y
nos tocaría un Primera División, que para el club sería muy bueno”. Y es que aunque el equipo llega de una derrota, explica que toda persona que se dedique a este deporte, cuando tiene un mal partido “está deseando que pase cuanto antes la semana e
intentar ganar la siguiente semana. Esta semana tenemos un partido el miércoles que es bonito para el club, la ciudad y nosotros”.
Será contra el Ceuta, un club que dejó una gran espina clavada en el xerecismo después de dejar al club sin ascenso en 2021. “Lo vi”, reconoce Domínguez. “
Fue duro para la afición. Quizás no era el momento y el fútbol
tenía guardado algo muy bonito. Se está volviendo a ver cómo la afición y la ciudad están orgullosas”.
Igualmente, entiende que la afición esté molesta con el equipo tras los últimos resultados: “Tienen derecho a mostrar su pensamiento. Son libres de pensar y decir lo que quieran. Pero que
lo hagan después del partido. Que no nos abandonen nunca durante los 90 minutos. Son nuestro número 12 y siempre nos acompañan. Nos dan aliento en los momentos de bajón. Espero y deseo que siga esa unión entre equipo y afición que nos llevará a conseguir victorias y a
convertir los pitos en aplausos”.
Y asegura que el equipo “
es el mismo, está igual. Ves entrenar los lunes a los que no juegan y entrenamos todos como si fuese el último entrenamiento. Eso es lo que el año pasado nos hizo estar donde estamos este año y
hará que volvamos a disfrutar como hace un mes. El equipo realmente está teniendo mala suerte, pero está bien y tenemos que seguir confiando”.
Esta temporada, el ariete está teniendo menos protagonista que el curso pasado y no oculta que “
todo el mundo queremos jugar. El que tiene que decidir es el míster. Nosotros tenemos que intentar ponérselo difícil cada semana. Hay que seguir
trabajando y mejorando. Intento hacerlo lo mejor posible. El míster mira por el equipo e intenta sacar el once que cree oportuno para ganar el partido. Tenemos que creer”.