La aerolínea Ryanair ha anunciado su voluntad de dejar de operar en el aeropuerto de Jerez en los próximos meses como consecuencia de las “excesivas tasas” de AENA y su falta de incentivos “viables”, lo que a su juicio está perjudicando a los aeropuertos regionales, limitando su crecimiento y desaprovechando zonas de capacidad aeroportuaria.
Ryanair
abandona también el aeropuerto de Valladolid, retirará un avión basado en Santiago de Compostela y reducirá el tráfico en Vigo (-61%), Santiago (-28%), Zaragoza (-20%), Asturias (-11%) y Santander (-5%) en lo que consideran una pérdida “completamente evitable”.
En total, la aerolínea irlandesa eliminará doce rutas y 800.000 asientos para su programación de verano de 2025.
El
consejero delegado de Ryanair, Eddie Wilson, ha criticado este jueves en rueda de prensa que
las medidas de AENA sean “ineficaces” y no apoyen los objetivos del Gobierno de conseguir más tráfico en los aeropuertos regionales de España.
El cese de operaciones en Jerez y Valladolid y la reducción de vuelos en otros cinco aeródromos ha sido atribuido por la compañía a la
“falta de efectividad” de los planes de incentivos y las “excesivas tasas” aplicadas por la empresa pública, a la que acusa de “monopolio”.
Según Wilson, tanto el aeropuerto de Jerez como el resto de los afectados por esta política de recortes
“tienen infraestructuras y la seguridad necesarias, lo que no tienen es la infraestructura de precios adecuada”.
De hecho, la aerolínea advierte de que este tipo de aeródromos presentan
una competitividad menor a sus equivalentes europeos y, por tanto, el tráfico tiene que desplazarse a otros lugares como Suecia, Croacia, Hungría Y Marruecos.
Esto es especialmente relevante, además, dadas las circunstancias que atraviesa el mercado aeronáutico, con Airbus y Boeing retrasando entregas de aviones por problemas en la cadena de suministro y, en el caso de la segunda, por problemas internos.