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El grupo contra los hurtos ya hace sombra a los ladrones

Ocho funcionarios de la Policía Judicial están detrás de la tranquilidad de los comerciantes tras el descenso en más del 50% de estos robos. Van de paisanos y gracias a ellos no hay que perder la mañana en Comisaría, ya que además de prevenir, tramitan la denuncia y dan citación para el juicio rápid

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  • Van de paisanos y se recorren de arriba a abajo las zonas comerciales. -

El alarmante  aumento de hurtos en las tiendas del centro y  zonas comerciales de Jerez (Area Sur, complejo Luz Shopping, Hipercor, etc.) es el responsable de que desde marzo de 2011 haya un grupo de agentes de la Policía Judicial dedicada exclusivamente a erradicar estos robos. El Grupo de Hurtos, en el argot policial los ‘sombra’ porque,  como explican, están a la sombra de este tipo de delincuentes, empezó con dos funcionarios de la Policía Judicial y ha tenido que ser reforzado con seis agentes más debido a la gran cantidad de trabajo y el descenso que ha registrado este tipo de robo. Siguen necesitando más.

 

De hecho, aunque en Comisaría de forma oficial hablan de una caída de más del 50 por ciento entre hurtos y robo de carteras, el porcentaje real es todavía mucho más generoso y confirma el acierto de una experiencia piloto que ya funciona en Sevilla o Madrid, y única a nivel provincial, que ha conseguido espantar a las bandas de origen rumano que cada semana se llevaban un botín curioso de las tiendas. Ahora cada vez más comprar en una tienda no tiene por qué ser un disgusto para el ciudadano que cuando vaya a pagar compruebe que no tiene cartera  y no se la dejó olvidada en casa.

 


Vestidos de paisanos, la rutina de estos funcionarios, que trabajan en grupos de cuatro en turno de mañana y tarde, comienza a primera hora y transcurre pegada a una emisora de la Policía Nacional. Desde ahí le van informando de los avisos que reciban de las tiendas para personarse en el establecimiento desde donde alerten o bien son ellos mismos los que pillan in fraganti a los responsables de los hurtos, ya sea porque sean viejos conocidos y habituales para ellos o porque algún detalle o en su manera de comportarse les alerte de lo que se va a producir. Detrás de esta labor también hay mucha psicología.  “Vamos dando paseos por toda la zona comercial del centro para ver y que nos vean porque nos habituales ya saben quiénes somos”, explica uno de los integrantes de este grupo.

De hecho, en más de una ocasión alguno de estos habituales les ha llegado a entregar la bolsa con los artículos sustraídos al toparse con ellos para evitar la denuncia.
Además de ahuyentar a los ladrones, ahorran al comerciante o encargado de la tienda que hace la denuncia tener que trasladarse hasta la Comisaría para tramitar la denuncia y perder prácticamente toda la mañana en las instalaciones del Arroyo. Llevan encima las actas para poner la denuncia y tramitar incluso el juicio rápido (hasta los 400 euros este tipo de acciones está considerada falta), y en el acto dan la citación para los juicios rápidos, que se celebran cada martes, tanto para el acusado, testigos, perjudicados, denunciado, etc.

 

Así también descongestionan la Oficina de Denuncias  y tan sólo reservan para las dependencias el envío de las actas al juez de cara a un juicio que nunca va a tardar en celebrarse más de una semana. Aunque ningún día es como el anterior,  la mínima de hurtos diarios es de dos en adelante y los viernes por la tarde son los días más complicados.


El producto estrella sigue siendo la ropa y el cambio de temporada y la campaña de Navidad son las fechas que más se prestan. Con los carteristas, es similar, aunque a estas fechas hay que añadir la Feria, los toros o el día de la Cabalgata, aprovechando que se lleva más dinero encima. Le sigue el perfume. En el caso de los hurtos, los habituales saben muy bien que a partir de los 400 euros es delito y se cuidan mucho de no superar esta cifra. Una vez más, como en otros casos, la ley hace la trampa.

Perfil: Mujer de entre 30 y 40 años que a veces trabaja por encargo

Según informan desde el Grupo de Hurtos de la Policía Judicial, el 80% de las personas que están detrás de este tipo de robo son mujeres españolas, habituales de Jerez, venidas de la sierra u otros puntos de Andalucía, de entre 30 y 40 años que a veces trabajan por encargo con su entorno de confianza, donde pueden incurrir en un delito de receptación por encargar y posteriormente adquirir la prenda o artículo en cuestión al precio pactado.

En contra de lo que puedan pensar muchos, los casos de hurtos de personas de nacionalidad extranjeras son muy secundarios una vez que las actuación de este grupo de agentes ha conseguido erradicar la presencia de bandas rumanas que se ponían de acuerdo para llevarse un cargamento curioso tras repartirse por varios establecimientos de Jerez y hacer su agosto.

Exceptuando incidentes aislados, se trata de personas nada conflictivas y que no van armadas a las que no siempre se les denuncia “porque nuestro cometido no es denunciar por denunciar”, explican. Y es que en muchas de las intervenciones tras identificar al presunto autor, se les da la oportunidad de pagar los artículos, sobre todo si el montante no es demasiado elevado, y se media para que hurtos de 3,4 ó 5 euros  no lleguen a denuncia, ya que es más costoso el proceso que viene detrás que lo que pierde la tienda.

No obstante, exceptuando algunos casos puntuales de grandes tiendas de ropa con precios de saldo, los ‘sombras’ resaltan los sofisticados sistemas antialarmas y las cámaras de vigilancia con la que cuentan la gran mayoría de los negocios, inclusive los de origen asiático que tanto se han expandido. Una práctica que confirma que los agentes no son los únicos que se han puesto las pilas en este sentido y no sólo en las grandes franquicias, sino en cualquier comercio tradicional donde son cómplices de la labor “personalizada” este grupo gracias a la cercanía de estos funcionarios.

 

Al DETALLE

Reacios a denunciar
Por su desconocimiento del idioma, los encargados de establecimientos de origen asiático intentan evitar por encima de todo la denuncia para no tener que ir a juicio.


10 segundos: una cartera menos
El Grupo de Hurtos coincide en la profesionalidad y “maestría” de los carteristas, que encuentran en los mayores su víctima perfecta, ya que a día de hoy son el único colectivo que suele llevar el dinero encima y no recurre a tarjetas.  Hasta 10 segundos han contabilizado los funcionarios que han llegado a tardar en apropiarse de una cartera sin que el perjudicado se percate.

Mayores y mercerías
Los carteristas, cuya presencia también ha descendido considerablemente, aprovechan el bullicio de pequeñas tiendas como las mercerías o tiendas habituales donde compra la gente mayor.

Robos más curiosos
Los efectivos detuvieron a una ‘madame’ de un negocio de prostitución de fuera de Jerez había robado más de 800 euros en ropa de una firma de lujo en unos grandes almacenes o a una habitual de Jerez, con problemas de drogadicción, que sustrajo una bolsa llena de ropa interior de un negocio chino

Viejos conocidos
Hay quien ha llegado a ir a despedirse de las dependientas de una tienda en cuestión donde  habitualmente hace de las suyas, para avisarles de que iban a estar una temporada tranquilas porque iba a entrar en la cárcel.


Bolsos apantallados
Es la técnica más recurrida para burlar las alarmas de seguridad. Van forrados con papel de plata el interior de bolso o bolsa de papel de regalo.


Mínimas consecuencias
El hurto es falta o delito en función del valor económico de lo hurtado.Será delito a partir de los 400 euros y suelen acabar en multa o arresto  domiciliario.

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