Más de una veintena de testigos del crimen del botellódromo que le costó la vida al menor Jairo Gómez, de 17 años, el pasado verano pasarán en cuestión de semanas por el Juzgado de Instrucción número 4. Según confirmaron fuentes del caso, las pruebas testificales de una instrucción que se prevé rápida están previstas para los días 19, 25 y 26 de octubre, siendo la Fiscalía la que ha llamado a la mayor parte de los testigos, independientemente de los que aporte la acusación particular y la defensa.
Así, al transcurrir los hechos la madrugada del 22 de julio en las explanadas del botellódromo, zona de la movida de muchos adolescentes en la ciudad, la mayor parte de los testimonios que escuchará el magistrado corresponderá a jóvenes del grupo del fallecido y los imputados Jaime D.R, de 18 años y Fernando M, de 19.
Hay que recordar que ambos permanecen en prisión preventiva en Puerto III prácticamente desde el día siguiente del suceso. Los dos están imputados por un presunto delito de asesinato, siendo el primero de ellos el supuesto autor material de los hechos, que se ayudó presuntamente de Fernando M. para asestarle al menos tres puñaladas mortales.
El principal interrogante de un caso que ha reavivado el debate de la seguridad en las únicas instalaciones en las que está permitido beber alcohol a raíz de Ley del Botellón, es la propiedad del arma del crimen. Hasta el momento, a juzgar por primeras declaraciones realizadas ante la Policía, según fuentes del caso, “nadie vio directamente el momento de la puñalada”.
La defensa del principal agresor, por su parte, mantiene que su representado actuó en “legítima defensa” después de que supuestamente el menor le golpeara, mientras que la del supuesto colaborador en este trágico suceso cree que su cliente “no pinta nada” y que no ha quedado demostrado que ayudara a la perpetuación del crimen.
En cualquier caso, el abogado de la acusación particular, Alfredo Velloso, que representa a la familia del fallecido, cree que el juicio oral, que será con juzgado popular, podría tener lugar en marzo de 2013, toda vez a priori la instrucción no presenta demasiadas complicaciones.
Esperando el plan de seguridad municipal
Según la acusación particular, el Ayuntamiento aún no ha presentado el protocolo de seguridad del botellódromo y el plan de actuación de los agentes que elaboraron el atestado, como responsable civil subsidiario del recinto donde acuden los jóvenes cada fin de semana.