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El centro, eje de las quejas de los jerezanos

Los problemas de ruido por la movida y los solares abandonados encabezan las reclamaciones sin resolver e la Oficina del Defensor del Ciudadano, que el pasado año recibió 260 demandas de intervención

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El ruido y la limpieza de solares y locales, tanto particulares como municipales, acaparan el mayor porcentaje de quejas sin resolver interpuestas ante la oficina del Defensor del Ciudadano (Palacio de Villapanés 2ª Planta). Según apunta Francisco Reinoso, al frente todavía de este cargo desde 2008, en el balance anual que espera poder presentar en el Pleno los problemas de ruido llegan a través de múltiples vertientes, contando por supuesto la de la movida. En este sentido, los botellones acumulan una parte parte de ella ante el malestar de las zonas afectadas, sobre todo los instantáneos que se generan  a las puertas de los bares de copas y en las inmediaciones de San Mateo (Plaza del Mercado), así como en el Parques Scout  o Iguazú.


Además de estos casos, cada vez son más los locales de boda así como incluso alguna que otra sede de una hermandad que son objetos de reclamaciones de los ciudadanos, estas últimas por habilitar un espacio con barra incluida que también trae de calle a los vecinos de estos barrios. En lo que respecta a locales, la situación llega a desesperar a muchas casas aledañas y la coyuntura económica tampoco ayuda con cascos de bodegas de propiedad municipales dejados de la mano de Dios, y espacios particulares sobre los que no se actúa. Aunque la normativa establece que al tercer aviso para que se tomen medidas por problemas de salubridad, el solar saldrá a subasta, la crisis ha convertido a este proceso en una espiral porque,  aunque esta práctica ocurre, Ayuntamiento no tiene dinero para adjudicárselo.


Siguiendo este orden, el estado  del alumbrado público y alcantarillado también han sido otras de la cuestiones que más han movilizado a los ciudadanos a la hora de recurrir a Reinoso para que desde su institución “fuerce” al Ayuntamiento a tomar una solución. No en vano, pese al amplio volumen de actuaciones realizadas, un total de 260, de las que más de la mitad corresponden a quejas y el resto a consultas, la tendencia desde que hace una década se puso en marcha esta figura en Jerez es a la baja. En cierta medida, el descenso de las demandas puede estar relacionado tanto con que la gente “está aprendiendo” y sabe que determinados temas que no son de competencia municipal (empleo, educación, vivienda, telefonía, etc.) y no tienen recorrido en esta dependencia, o bien con que los técnicos municipales “están haciendo mejor su trabajo”.
 

Después de esta batería de quejas, la marea negra o los problemas de accesibilidad con especial atención a la falta de reparación de las plataformas de accesos de los autobuses han sido otra de las demandas de intervención planteadas en esta oficina.  En total, durante el pasado ejercicio el Defensor del Ciudadano realizó 263 entrevistas personales, que es el canal preferido de los jerezanos para pedir asesoramiento,  atendió a 167 personas y a una veintena de grupos. Aún así, Reinoso sigue echando en falta una mayor familiaridad de los ciudadanos con esta institución. En lo que respecta al perfil de los demandantes individuales, el 50 por ciento de las quejas o peticiones proceden de hombres, mientras que un 32,21 por ciento son de mujeres.

En cuanto a las colectivas, el 6,25 por ciento vienen de asociaciones de vecinos, mientras que el 0,48% restante corresponde a asociaciones vecinales. Unos foros estos últimos que, a juicio de Reinoso, a veces reciben un trato “fiscal” por parte del Ayuntamiento  como si de una entidad de interés privado se tratase pese a promover actividades gratuitas. Para ello hace mención expresa a lo que le ocurrió a la asociación de vecinos de Palos Blancos, cuando el Consistorio les denegó su solicitud para que las tasas de instalación de un castillo hinchable tuvieran coste cero.
Siguiendo con la memoria, el 52% de las demandas de intervención llegan a través de la entrevista personal, el 34,97% vía emails y y tan solo un 7,69% y un 4,90% lo hacen respectivamente por correo ordinario y teléfono.


La procedencia de estos expedientes cursados ante el Defensor del Ciudadano también arroja un dato interesante. Una buena parte el 25%, corresponde a la zona centro y de Madre de Dios. Le sigue con bastante diferencia con un 17% las que vienen de la zona de Las Delicias y Chapín, la Zona Norte (16%), la Zona Sur (15%), sin zona concreta (12%), La Granja (7%), Zona Rural (6%) y la Avenida Álvaro Domecq.  Por áreas es Urbanismo, Vivienda e Infraestructuras la que lidera con creces el número de expedientes de quejas, petición y mediación, con un 41% (65 expedientes), seguido de Medio Ambiente y Deportes (14%), mientras que Turismo y Fiestas y Juventud o Alcaldía Pedánea son las áreas “más tranquilas”.

Reinoso defiende la necesidad de “salvar"  la institución

Francisco Reinoso fue elegido en el Pleno en agosto de 2008 y según el Reglamento Orgánico Municipal (ROM) su mandato deberá prolongarse 5 años. Sin embargo, sus críticas por los despidos que el PP llevó a cabo sobre tres de sus cuatro compañeros de esta institución, -él mismo declarará como testigo este miércoles en el juicio- pueden precipitar su salida del Palacio de Villapanés. Reinoso ha criticado abiertamente los criterios de selección empleados y la “mancha” que deja en el historial de sus ya ex trabajadores los criterios de polivalencia, eficacia o competencia a los que se aferró el Ayuntamiento.


Ante estas circunstancias pidió en vano dimitir en el Pleno, mientras que el nuevo Reglamento de Participación Ciudadana aprobado ha sido la gota que ha colmado el vaso.
Dicha norma contempla que las funciones de defensa de los intereses de los ciudadanos la asuma la comisión de sugerencias y reclamaciones, que como tal debe presidir el alcalde e integrada por concejales. Si bien la alcaldesa, ha llegado a asegurar que la intención es que  sea el propio Defensor el que presida esta comisión, Reinoso tiene claro que esto es “jurídicamente imposible”. A partir de ahí, se espera que su cese sea publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOP), la cual se puede impugnar.


Además, a raíz del nuevo reglamento, el todavía Defensor del Pueblo advierte de que en caso de que haya impugnación puede darse la paradoja de que en Jerez la figura se encuentre representada doblemente por la alcaldesa y por él mismo. Sea como fuere tiene claro lo necesaria que es esta institución, ya sea en su persona o en otra, y defiende la necesidad de “salvarla” ante los nuevos pasos dados por el PP.

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