El secretario general del PP-A, José Luis Sanz, ha inaugurado este mediodía en Jerez junto al vicesecretario de Política Autonómica y Local del PP, Javier Arenas,  la convención de alcaldes del PP-A.

Sanz ha denunciado la situación de "abandono" de la Junta a los ayuntamientos y ha asegurado que los consistorios gobernados por el PP serán los que lideren la recuperación económica de la comunidad, "algo que no va a conseguir el bipartito".

Sanz ha presumido del trabajo de los alcaldes populares en la comunidad, "que siempre son ejemplo de buena gestión", frente a la "ruina, paro, crisis y corrupción que caracteriza al PSOE" en los gobiernos municipales.

Ha indicado que han sido dos años complicados por la situación económica que dejó "el presidente más insolvente que ha tenido el país" (en referencia a José Luis Rodríguez Zapatero) y también por "la situación de abandono a la que somete la Junta a los ayuntamientos andaluces".

"En el peor momento tenemos el Gobierno andaluz mas sectario y mas beligerante contra los ayuntamientos", ha añadido Sanz, quien ha lamentado que haya pasado un año "sin tomar ni una sola medida para paliar los problemas económicos y financieros".

El secretario regional del PP-A considera que si fuera por la Junta "los ayuntamientos ya habrían colgado el cartel de cerrado por ruina", algo que se ha contrapuesto con la labor del presidente del Ejecutivo nacional, Mariano Rajoy, que en su opinión "pasará a la historia como el salvador de los ayuntamientos andaluces".

El año de bipartito entre PSOE e IU, para Sanz, se resume en un "desprecio" a los ayuntamientos y a los andaluces, ya que "lo único que ha hecho es poner zancadillas", algo que ha argumentado en la ausencia de medidas o en el "recorte" del plan de cooperación municipal, del que se adeudan "más de 400 millones".

Sin embargo, ha asegurado que "la buena gestión del PP" será la que se convierta en el empuje de la comunidad, también por la vocación "municipalista" del partido.

En los dos años que restan hasta las elecciones municipales de 2015, el PP andaluz va a exigir a la Junta "que no molesten y no estorben" a sus alcaldes, que quieren "seguir trabajando para solucionar los problemas de los andaluces", ya que cree que Griñán y el vicepresidente, Diego Valderas, "luchan diariamente por ver quién es el Chávez de Andalucía".

La tarea de la formación también será trabajar en los próximos dos años para volver a ganar las municipales, ya que "este partido no tiene límite, ni el PSOE ha tocado suelo en Andalucía, ni el PP ha tocado techo", ha apuntado Sanz.

"Cada día se va a poner más de manifiesto que la única garantía de futuro que tiene Andalucía es el PP", ha concluido Rojas.

Arenas

El vicesecretario de Política Autonómica y Local del PP, Javier Arenas, ha admitido hoy que lo correcto para reformar la administración sería cerrar un acuerdo con el PSOE, pero ha lamentado que los socialistas "no están en condiciones" de pactar porque están dedicados "a ellos mismos".

Durante su intervención en la inauguración de una convención de alcaldes del partido en Andalucía, ha dicho que "lo correcto sería cerrar un gran acuerdo con el PSOE" pero que "bastante tienen que si Chacón, que si Rubalcaba o que si Patxi López, ellos están en eso".

Ha asegurado que el PP está dedicado al cien por cien "a los españoles", mientras que el PSOE "está dedicando el cien por cien a ellos mismos".

En ese sentido, ha señalado que el líder de la oposición, Alfredo Pérez Rubalcaba, propone algunos acuerdos "pero las propuestas que hace son las que nos llevaron a la peor crisis", por lo que ha afirmado que están dispuestos a pactos siempre que sean "reformas de futuro" y no sobre "recetas del pasado".

Para Arenas, la reforma de la administración "no puede quedar en absoluto en los ayuntamientos", sino que tiene que llegar al Estado y a las comunidades autónomas, aunque ha destacado que en estas últimas existe un problema competencial porque los estatutos "amparan un marco de autogobierno que dificulta que se puedan alcanzar decisiones nacionales".

Aun así, Arenas considera que "la mayor reforma que se esperaba de la administración pública ya se ha hecho" con la ley orgánica de estabilidad presupuestaria, "una reforma clarísima que viene a decir con amparo constitucional que ninguna administración puede gastar más de lo que ingresa".

Ha reiterado que le da categoría de "gran reforma" a esa ley, que ha sido "un paso muy importante", pero que hay que llevar a cabo una nueva ley de régimen local que sea compartida por todos los alcaldes "y no impuesta", para lo que ha informado de que ya hay "niveles de consenso muy altos".

En ella, ha dicho, se debe clarificar las competencias y garantizar el pago cuando no son municipales, especificar el papel de los interventores y cuerpos nacionales, y que haya unos costes estándar exigibles para garantizar la calidad de los servicios.