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¿Qué le falta o le sobra a la Feria para mejorar?

Peñas flamencas, hosteleros y otros colectivos valoran la última edición en el González Hontoria. Las primeras están satisfechas con la dosis de flamenco pero piden que sea auténtico. Hay casetas en las que hacen falta más profesionales y menos abusos en los precios

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  • El Real de la Feria. -

La resaca de Feria provoca cada año el eterno debate sobre si peligra el flamenco y las sevillanas frente al pachangueo,  la seguridad o el mal estado del albero, temas recurrentes y que estos días se han visto más alimentados, sobre todo en lo que respecta a la “banda sonora” después de que la alcaldesa, María José García-Pelayo, invitara a los sectores representativos de la fiesta grande de Jerez a hacer una “reflexión” sobre el tan explotado tema de la música. Eso sí, manteniendo su defensa “a capa y espada” del flamenco por encima del resto de los estilos musicales. Conclusión: estamos en el mismo punto que todos los años.

Por ello, dejando a un lado las valoraciones y los reproches previsibles que estos días han protagonizado los dirigentes políticos, las peñas flamencas, hosteleros con casetas, asociaciones de comerciantes y otros portavoces de la sociedad jerezana opinan en estas líneas de forma constructiva sobre lo que habría que cambiar de la Feria para mejorar de cara a su próxima edición de 2015.

Si hay algo en lo que todos coinciden es que la crisis económica sigue ahí, y es casi obligado que el Real también lo acuse con menos público concentrado a la hora de la comida u otros momentos del día, por mucho que los jerezanos adoren esta cita o aumente el número de visitantes que, según el Ayuntamiento, vienen a disfrutar de esta convocatoria. “Yo la Feria no la he visto ni mejor, ni peor que otros años, lo que sí es verdad es que es un reflejo de la situación económica que estamos viviendo, sí, hay más visitantes, pero los caseteros no han obtenido el resultado económico que se esperaba porque si antes entraban cinco y se gastaban 100 euros, ahora entran los mismos, están el doble de tiempo y se gastan la cuarta parte”, señala Manuel Moreno, presidente de la Federación Local de Peñas Flamencas de Jerez, que tiene claro que este evento “está bien enfocado” pero “si no hay dinero el estado de ánimo no tiene que ver”, sin dejar de reconocer el “esfuerzo” del Ayuntamiento “a pesar de la situación económica que hay”.

¿Peligra el flamenco en la Feria?Todo lo contrario, a juzgar por las manifestaciones de Moreno. “Este año las peñas flamencas nos hemos recreado a pesar de la crisis, porque se han representado espectáculos que han sido un rotundo éxito. A nosotros no nos afecta el cambio de música porque el flamenco es el auténtico protagonista de la Feria y la tradición”, añade.


De hecho, el representante de las peñas flamencas también hace un llamamiento a la tolerancia en este sentido. “Queremos que el mayor número de casetas se sumen a esta tradición del flamenco, pero si vienen miles de personas tampoco se trata de atiborrarlos; si te gusta la berza te tomas un platito, pues con el flamenco pasa lo mismo, hay que cuidarlo para que la gente no lo aborrezca y haya un ambiente de de flamenquería con autenticidad”, sostiene.

Los puestos de seguridad, dentro
Lo que sí propone Moreno al Ayuntamiento para 2015 es que se tenga un especial cuidado con los cinco huecos de las casetas que se han dado de baja y que este año sus espacios se han podido ver en el Real, con la mala imagen que ello conlleva. Esto traerá aparejado una reestructuración para el próximo año, y por ello ya se han adelantado y plantean que sean cautos a la hora de colocar junto a las casetas tradicionales y de las peñas flamencas otras donde impere la música discoteca. “No nos parece mal que suene esta música, pero por respeto no al lado de una en la que hay actuaciones flamenco”, señala. Completar los huecos de esas casetas, dando espacio a los puestos de Protección Civil, la Policía Local y los Bomberos es otra de las sugerencias desde la Federación de Peñas Flamencas de Jerez para futuras ediciones.


“Cuanto más cerca los tengamos mejor, porque al final tienen que entrar con los vehículos al Real si pasa algo”. Respecto a la ventanilla única de la que el Ayuntamiento ha “presumido” esta edición, Moreno lo tiene claro: suspenso. “Vendieron la piel del oso antes de matarlo y los caseteros se han vuelto locos para pagar por un lado el agua, por otro la luz y las tasas...se trata de dar facilidades”, sentencia.

Mantener la esencia propia y decir ‘no’ a los experimentos

En la hostelería tampoco ponen demasiadas pegas a esta última edición de la Feria del Caballo. A Horeca, la patronal hostelera, le consta de buena tinta que muchos de sus socios han salido bien parados, si bien también se ha dado el caso de otros que han explotado más de una caseta en la que las cosas no han ido tan bien como se esperaba. “Yo la Feria la he visto bien, lo que hay que tener en cuenta es aquellas que tienen un alto nivel gastronómico, porque son las que tienen más demanda y cuentan con personal cualificado”, apunta el presidente de Horeca, Antonio de María Ceballos, que reclama más “profesionalización” del sector porque “no atiende de la misma manera un profesional que trabaje en un establecimiento jerezano que cualquier persona que se contrate para hacer la Feria”.

Como iniciativas a tener en cuenta, propone la puesta en marcha de una ludoteca en el recinto ferial. Y es que en estos días ni los abuelos ni los titos están dispuestos a hacer de canguros a los padres para que se escapen a la Feria todo el tiempo que quisieran. “Hay muchos matrimonios que tienen que renunciar a ir porque no saben con quien dejar a los niños, y en una ludoteca pueden estar bien atendidos mientras sus padres se toman algo en el Real o simplemente bailan sin la intranquilidad de estar pendientes de sus niños”, señala.


En el seno de la asociación de comerciantes de Acoje, su presidenta Nela García, tampoco pone demasiados peros a esta cita siempre y cuando el Ayuntamiento mantenga su esencia y tanto la administración como el resto de sectores implicados se dejen de “experimentar sin sentido”. “Vendemos que tenemos un valor diferenciador respecto al resto, por eso no tenemos que cambiar ni la duración ni la estructura porque  es una feria reconocida de renombre; por lo que tenemos que luchar es porque se oiga en positivo”, manifiesta. Eso sí, a modo de sugerencia, García también cree que no es bueno que se intente apostar por el último domingo para que venga más gente de fuera con precios especiales en casetas y cacharritos “cuando hay caseteros que empiezan a recoger a las cuatro de la tarde”.


La Asociación de la Prensa de Jerez también se ha hecho eco de determinadas críticas por los precios en algunos casos de las casetas y  el mal estado del albero. “Los precios los he visto caro en más de una caseta y no acabamos de ver que la gente en la Feria tenga que pagar un plus, creo que hay margen suficiente para que los caseteros ganen dinero sin que se tengan que pagar precios excesivos. Asentar el albero a horarios “más propicios” también es otra de sus sugerencias, ya que el fuerte viento y los charcos han hecho de las suyas esta última edición. Estéticamente, poco que añadir. “Los turistas alucinan con la iluminación”, asegura. Controlar los horarios de la música en directo es otra de sus propuestas.

LO QUE SE DIJO

Manuel Moreno, presidente de la Federación Local de Peñas Flamencas

“El flamenco no tiene una hora determinada en la Feria, sino que es un estado de ánimo”

Nela García, presidenta de Acoje

“Nada de experimentar sin sentido porque perderemos la esencia que tenemos”

Antonio de María Ceballos, presidente de Horeca

“Una ludoteca vendría bien para que los matrimonios estén tranquilos en la Feria

María José Pacheco, presidente de la Asociación de la Prensa

“La hemos visto un poco cara; hay margen para ganar dinero sin pagar precios excesivos”

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